Me alegra leer que mi artículo te haya ayudado y hayas podido definir la misión, visión y valores. Evitar que continúen los actos inhumanos hacia los migrantes en diferentes países es el objetivo de “Un español en Alemania”, protagonizado por José Mateos Mariscal.
Aunque estamos conscientes de las leyes que rigen cada país, estamos en contra de que las autoridades pasen por encima de los derechos humanos de quienes intentan cruzar las fronteras todo el mundo tenemos derecho de libertad. Con este capítulo de “Un español en Alemania” quiero poner un granito de arena para hacer conciencia y empatizar. Seguiré insistiendo en que puedo entender las leyes mundiales, pero nunca entenderé las formas, somos humanos y merecemos ser tratados como humanos, podrás o no estar de acuerdo, pero si el día de mañana te pasara a ti, ¿tú qué harías?
Por la razón que fuera, ya sea social, política, personal, de violencia, tú tuvieras que tomar la decisión de irte a otro país, ¿qué harías y qué quisieras para ti?, afirmo siempre en mi serial “Un español en Alemania”, que aborda el calvario que vivió la familia Mateos en Alemania. Como español y nacido en Zamora, tengo mucha familia que vive en Zamora (España) o vivía ahí y se vieron obligados a dejar España.
Tengo mucha similitud y acercamiento con sus historias; si bien no ha sido de la misma manera hay algo que me acerca mucho a estas historias de inmigrantes que es la falta de oportunidades. Estoy involucrado, espero realmente generar conciencia en las autoridades de diferentes países, como España y Alemania respecto al trato de los migrantes. No porque contemos esta historia quiere decir que todos los finales son felices, hay otras personas que no han podido reencontrarse padres con hijos o no saben si siguen vivos, es una historia de la vida real que nos refleja la actualidad, lo grave de la situación que se vive.
Desire Bernal Matias, nacida en Valencia (España) residente en Düsseldorf.
Para mí, un migrante es una persona valiente y soñadora, como yo. Valiente, porque pude soportar hambre, dolor por caminar sola por Alemania sin conocer a nadie, todo por alcanzar un sueño. El mío es graduarme en derecho y ser alguien útil para mi comunidad o mi país y para las personas que me rodean. Soñadora porque cuando se tienen sueños uno se desafía a sí mismo para lograrlo. Mi sueño más grande siempre ha sido graduarme en derecho, ser abogado. Estoy en un país, Alemania, con más oportunidades para poder alcanzar mi sueño y que mi excusa ya no sea ‘no hay recursos económicos’. No. Estoy estudiando involucrada en actividades que me inspiran a seguir adelante.
Cuando salí de mi país, España, hace un año, nada fue fácil -el idioma alemán-, pero lo que siempre me inspiró, como dije anteriormente, fueron las metas y sueños que quería alcanzar y me decía a mi misma “No, lucha, lucha por lo que quieras, allá podrás lograr todo, solo esfuérzate un poquito”. Me vine por situaciones económicas difíciles que hay en mi país, por lograr algo soñado, algo que ya estaba en mí. Mi viaje hasta aquí no fue nada fácil. Sufrí, pero no me di por vencida. Fue difícil porque el idioma alemán, entre más estudiaba menos aprendía: sin comer, sin tomar agua dos días. No es nada fácil y me pregunto cómo los niños más pequeños soportan tanto. Es terrible pues nosotros los jóvenes deseamos lograr nuestras metas o alcanzar lo que queremos, hacemos grandes cosas y no miramos lo difícil que es la barrera del idioma, porque sabemos que después de todo, vendrá un día donde podremos gozar.
Pero venir a este país no es solo llegar, hay que traer sueños, hay que traer metas. Porque no es nada fácil dejar a tu familia o tus costumbres. La razón por la que yo me vine fueron mis aspiraciones y el peligro de desahucio que había en mi país, España. Me puse triste por lo que dejaba, pero feliz por lo que venía a buscar. Feliz a pesar de tanto sufrimiento en un camino donde lo único que se presenta es sufrimiento. Pero es más fuerte lo que tienes por dentro, que las apariencias o la mente te dice. Cuando llegué dije: “Woow, mis sueños serán cumplidos y pensé en las demás personas y dije, ojalá todas tengan la misma oportunidad que yo tuve”.
Algo que me ayudó bastante fue mi escuela. Cuando llegué a este país la escuela fue uno de mis más grandes apoyos. Más los maestros, porque el idioma fue uno de mis grandes retos, pues no entendía nada. Acudí a mis maestros y compañeros que sabían español. Mi consejo es que si tienes amigos que saben ambos idiomas, y eres recién llegado a este país, por favor, pide ayuda, porque no es nada fácil al llegar. Tener dificultades como estas, la escuela y tus compañeros son el complemento perfecto para ayudarte. Sé que no es nada fácil pero habla con tus amistades, maestros y compárteles tus problemas, estoy segura de que ellos te pueden ayudar como lo hicieron conmigo. Y si tienes algunas otras necesidades, cuando llegues a este país, visita programas en la Misión católica española en Remscheid. Ahí hay grupos y organizaciones que te pueden ayudar. Por favor no te quedes callado, aquí cuentas con muchos beneficios y derechos, que te ayudan, te defienden. Así que no te quedes callado, sea cual sea el problema, ¡habla, no estás solo!
Finalmente, la vida del migrante es difícil, arriesgada, complicada, sufrimos, lloramos y creemos que todo ahí queda porque sentimos que nuestras fuerzas se agotan. Gracias a dios estamos aquí, es lo importante, que tenemos la oportunidad de seguir adelante con nuestros sueños.
Mario Ponze Segura nació en Extremadura (Cáceres), residente en Duisburg.
Nos cuenta la aventura de la emigración un migrante es una persona valiente y soñadora, ser una persona con muchos valores y muchas metas. Mi viaje a Alemania comienza el 29 de octubre de 2017. Llegué a Colonia donde estuve dos días y al día siguiente tomé un autobús que me llevó hasta Remscheid (Alemania). Estuve en un hotel tres días, después partimos a un lugar, y de ahí a la Ciudad Essen. Pero para llegar ahí, tuvimos que pasar por muchos problemas, yo sentía que me ahogaba de la ansiedad, pero gracias a Dios llegamos muy bien.
Me vine de mi país porque sufría desahucio tras desahucio, no encontraba trabajo, no podía pagar mis deudas y personas estaban extorsionando a mi mamá que le decían que si no les daba una cantidad de dinero nos iban a desahuciar, me vine con cuatro hermanos y un sobrinito. Escribo esto para que las personas que hablan mal de nosotros, sepan lo que es un inmigrante. Un inmigrante no es una persona mala. Quiero que sepan que las personas que vienen de sus países no vienen a hacer el mal, sino porque tienen una mala vida o por amenazas, peligros desahucios, hay muchas razones.
Yo les diría a todas aquellas personas que están pasando por la misma situación que yo pasé, que escuchen los consejos de las personas. Que sean amigables y que se anden con cuidado y si quieren lograr sus metas, tengan iniciativa y tomen buenas decisiones. Que el estudio es muy bueno y que si tiene algún problema, hablen con personas mayores. Espero que sigan mi consejo, y el de todas las personas que les aconsejan, porque han pasado por ese problema de desahucio en desahucio. Espero que se encuentren bien. Le doy las gracias a las personas que me permitieron expresarme y escribir esto, gracias por permitirme aprender acerca de "Un español en Alemania" y saber cómo funciona Alemania.
Israel Martín Pérez: Español residente en Colonia. Soy de Granada (España), mi linda Andalucía, la región de España de la eterna primavera, soy un migrante más en Colonia (Alemania). Para mí, un inmigrante es alguien que tiene el valor suficiente para dejar sus raíces atrás sabiendo que las personas que estuvieron con él, tal vez no las vuelva a ver, sabiendo que entrará a un país donde no conoce a nadie y tiene que adaptarse a un nuevo estilo de vida, al idioma, al país cual no pertenece. Un migrante es aquel que por razones propias decide dejar todo para obtener algo que no tiene en su país, por peligro o miedo, pero también es alguien que lucha fuerte por sus sueños sin importar las pruebas que vengan. Es aquel que no se avergüenza de ser inmigrante y demuestra el saber de su país. En este momento estoy en la escuela de idiomas aprendiendo alemán. Soy parte de muchos grupos de españoles en Alemania, estoy en deportes.
Emigré de mi país hace dos años. Salí en octubre de 2019 y llegué a los Alemania en diciembre de ese año. Empecé a ir a la escuela cinco días después de haber llegado y desde entonces estudio alemán, inglés y francés.
Muchas de las razones por las cuales decidí emigrar a este país fue por el peligro a quedarme en la calle en España, la economía de allá no es boyante y por los sueños y metas que tenía, pero también sentí que podría ser alguien importante en la vida y para quienes me rodean. Yo quería ser alguien pero para eso necesitaba un buen estudio lo cual en mi país España es difícil, entonces para lograr eso tuve el valor suficiente para dejar a mi familia y aventurarme a experiencias y desafíos nuevos los cuales me iban a derribar, pero en mí estaba el volverme a levantar y seguir luchando. Para poder llegar aquí tuve que ver a mi madre llorar porque su hijo se estaba alejando de ella, tuve que ver a mis hermanos llorar porque tal vez no nos volveríamos a ver. Tuve que tomar la decisión más difícil en mi vida, luego tuve que viajar en autobús, taxi, avión, bote, a pie y en coche.
Un consejo que le puedo dar a alguien que está pasando lo mismo que yo pasé es que nunca mire hacia abajo ni pierda las esperanzas, nunca se rinda porque cuando menos se lo espere cosas buenas pasarán en su vida. La vida no es fácil, pero nada es imposible. Busca maneras de levantarte, recuerda el porqué estás haciendo esto, recuerda el motivo, piensa en las personas, en lo que quieres que piensen de ti, en lo que piensas de ti mismo. También puedes apoyarte en las personas a tu alrededor. Que no te de vergüenza decir ‘necesito ayuda’, solo no podrás, pero si buscas ayuda y te enfocas, nada será imposible. Gracias a todas las experiencias que he vivido en Alemania y personas que he conocido, y la ayuda que he recibido.