Toros

Hermanos González: en las citas más relevantes

Así de bien hecha estaba la novillada de Guadarrama
ALFREDO FERNÁNDEZ | Miércoles 22 de octubre de 2014
La ganadería de Hermanos González Rodríguez ha vuelto a tener un importante papel en el devenir de la temporada en la Sierra.

La vacada que pasta en la finca Los Linarejos de Collado Villalba ha estado en algunas de las citas más trascendentales de la temporada serrana. Plazas como Moralzarzal, Guadarrama o Collado Villalba han sido testigos del sello y la personalidad de esta histórica vacada serrana.


Santiago y Guillermo González, hombres de pocas palabras, son ganaderos a la antigua usanza. Como se hacían las cosas toda la vida. Como debe de ser. La liturgia, el sentimiento y el amor por lo campero son para estos ganaderos piezas fundamentales en la crianza del toro bravo. Y es que el ganadero de siempre es especie a extinguir.

Se mantienen ilusionados, viven la ganadería día a día, lejos de la vanidad de ricos llegados del ladrillo. Lejos de modas e imposiciones trabajan por seguir en lo alto y mantener el legado dejado por su padre.

Comencemos con el final, con la novillada que lidiaron en la feria de Moralzarzal. Si la mejor novillada de esta feria fue la de Torrenueva, la de estos ganaderos, fue con diferencia la mejor presentada del serial. Un encierro de una irreprochable presencia, muy parejo, cuajado y muy agresivo de cabezas. El sexteto hizo las delicias de la afición de Moralzarzal. En la plaza bien es cierto que hubo de todo, pero con novillos aprovechables. De todos los utreros lidiados, dos ofrecieron muchas posibilidades que bien es verdad que fueron bien entendidos por el novillero Pérez Mota que cortó tres orejas, siendo uno de los espadas destacados del abono.

Los Hermanos González gozan de gran cartel esta plaza y en este pueblo, y sus novilladas son siempre muy esperadas por su afición. Mantienen el cartel en lo más alto y seguro que de nuevo volverán a estar presentes en la feria de 2006.

Otra de las citas de más relieve de su campaña fue la feria de Guadarrama, entrando por la vía de la sustitución en una novillada picada. Allí se corrieron seis utreros de unas preciosas hechuras y muy finos de cabos. Un encierro muy bonito, parejo y limpio de lámina que tuvo nobleza, aunque también sacó sosería. Al encierro se le pudieron cortar muchas orejas si los novilleros andan con más tino con los aceros. De todos modos hay que destacar a un buen novillo, de nombre Carcelero,y al que David Esteve le cortó una oreja.
Éxito En Collado Villalba
Pero el mayor éxito de la divisa de Collado Villalba cosechado en la temporada 2005 tuvo como escenario precisamente este municipio dentro de la feria de San Antonio.

El encierro fue uno de los más terciados de la camada, aunque tuvo una gran armonía de hechuras. Los novillos serranos dieron una tarde muy entretenida por su alegre comportamiento en varas y las posibilidades en la muleta de varios de ellos. De todos hay que destacar a Pantera, un novillo que tomó tres puyazos arrancándose desde el platillo de la plaza en los dos últimos encuentros. El la muleta resultó muy potable y su matador, el novillero Medhi Savalli, le cortó los máximos trofeos habiendo una fuerte petición de vuelta al ruedo para el novillo. Savalli también le cortó los dos apéndices al último de la tarde. Alberto Aguilar y Jiménez Caballero se fueron de vacío, ya que fueron incapaces de triunfar a pesar de tener ejemplares muy aptos para su triunfo. ¿Por qué esta ganadería no se lidia en la feria de Santiago Apóstol después de lo que vemos?
Los Hermanos González también lidiaron una excelente novillada sin caballos en la tradicional Novillada de La Caldereta de Hoyo de Manzanares. Un conjunto de alta nota donde dos erales fueron premiados con la vuelta al ruedo y donde los chavales les cortaron un buen puñado de orejas.

Para el próximo 2006 aguardan en Los Linarejos otras cinco o seis novilladas, conservando las características de este ya encaste propio y siendo fieles files a las hechuras, la seriedad, la finura y la variedad cromática de pelos. Un hierro de la comarca para tener en cuenta y que con novillos mejores o peores normalmente llevan emoción.