Casi medio millar de familias que residen en Navacerrada y Cercedilla, según ha informado la semana pasada Telemadrid, después de vivir 50 años en sus casas, ahora las tienen que abandonar. Esta es la angustiosa situación a la que se enfrentan unas 400 familias en Navacerrada y Cercedilla debido a que la cesión de los terrenos dónde estas fueron construidas ha caducado, una cesión, según las citadas fuentes, que afecta también a nueve edificios, tres chalés, dos albergues y dos residencias militares.
Todo esto se remonta al año 1920, cuando la Sociedad Anónima del Ferrocarril Eléctrico de Guadarrama cedió estos terrenos con la pretensión de construir una vía de tren y complejos sanitarios para enfermos de tuberculosis. En los años 70 se levantaron bloques de apartamentos y chalés a la falda del Puerto de Navacerrada y en la Colonia de Camorritos de Cercedilla.
Concesión finalizada
De eso han pasado ya cien años y la concesión ha expirado, según Telemadrid, por lo que los terrenos deberán volver a los dos ayuntamientos (Navacerrada y Cercedilla) que fueron los que los cedieron en cumplimiento de la Ley. Con ello, los afectados se quedarían así sin viviendas, al no poderse renovar la concesión, ni tampoco renovar el contrato, según los informes jurídicos de la Comunidad de Madrid. El ejecutivo regional dice que por tanto, propietarios de las viviendas y ayuntamientos deberán ponerse de acuerdo y buscar una solución a esta situación compleja. Una solución que de momento no llega y que tiene en ascuas a los afectados.
Desde el Ayuntamiento de Navacerrada, en un tono conciliador entienden que hay que estudiar la situación para no perjudicar a los vecinos afectados, aunque reconocen que la titularidad de dichas viviendas pertenece a los dos consistorios. En cambio, el Ayuntamiento de Cercedilla dice que los terrenos le pertenecen y una vez que se cumpla el plazo de concesión de cien años, lo construido tiene que volver al consistorio ‘parrao’, por lo que los propietarios tienen que entregar las llaves de las viviendas o, en su caso pagar un alquiler.
¡Nos desahucian!, dice uno de los afectados que lleva viviendo 20 años en uno de los apartamentos que compró en su día y denuncia que “no nos da la posibilidad de negociar con la Comunidad de Madrid, ni siquiera de platear una solución al Ayuntamiento de Navacerrada, ni al de Cercedilla”, añadiendo que “hay un informe jurídico publicado por el Ministerio de Agricultura, en el que se señala que hubo “una venta encubierta” por parte del Ayuntamiento de los terrenos en los años 70, por tanto serían propietarios de pleno derecho, algo que ahora quieren demostrar judicialmente y que en todo caso tendrían que ser indemnizados.
Por otro lado, Silvia, otra de las vecinas afectadas según Telemadrid, que lleva toda la vida viviendo en el Puerto dice: “Nos quieren echar, estorbamos”, añadiendo que intuye que detrás de todo esto “podría haber otros intereses”.
Todo hace prever que este asunto está condenado a terminar en los tribunales.