Haciéndose eco de la preocupación de los vecinos de Prado Grande, el Partido Popular de Torrelodones cuestionó el pasado mes de noviembre a la Concejalía de Urbanismo, sobre el estado de las obras de Prado Grande que llevan un tiempo paralizadas, tal como publicó esta misma semana El Faro del Guadarrama. Dicho interés venía motivado por el malestar trasladado por los vecinos de la zona que no entienden que una obra adjudicada en base a un proyecto en cuya gestación se emplearon dos años y en el que participaron los vecinos con propuestas, reuniones y encuestas haya tenido que ser objeto de modificación a los 90 días del inicio de las obras.
Las razones dadas por el Concejal de Urbanismo, David Moreno fueron tres: presencia de rocas al realizar una zanja, obstrucción en el actual sistema de saneamiento del parque y existencia de una línea subterránea para el alumbrado. Razones que posteriormente ha repetido el Ayuntamiento en rueda de prensa publicada en la web municipal y recogida por diferentes medios de comunicación.
La cuarta obra que se paraliza últimamente en el municipio
“Consideramos, prosigue el PP en su comunicado, que los vecinos de Torrelodones merecían más información al respecto, preguntamos en la sesión plenaria de este mes de diciembre por el tiempo previsto de paralización de las obras y posterior ejecución y, sobe si va a modificarse el proyecto ya adjudicado.
“A esta paralización de las obras de Prado Grande se suma la que, entre otras, sufrieron la construcción del túnel bajo la A-6 y el campo de Rugby, que se resolvieron con unas soluciones arquitectónicas de peor calidad a las licitadas, al mismo precio de adjudicación, pero más rentables para los contratistas. La obra de la Biblioteca municipal de la Colonia, también está actualmente detenida y al contratista se le han aplicado unas multas que debieran se dinerarias, pero no parecen serlo.
Esta serie de retrasos y paralizaciones, concluye en su comunicado el Partido Popular torresano, de las obras contratadas por el Ayuntamiento presidido por Vecinos por Torrelodones, nos hacen cuestionarnos, como en el chiste del que conduce su coche en dirección contraria, si son culpables los contratistas o es el equipo de gobierno quien, en este caso, circula en dirección contraria”.