Alpedrete

Muchos ciudadanos piden la restauración y protección del Palacio Mataespesa de Alpedrete

El Faro | Jueves 25 de julio de 2019

A la redacción de El Faro del Guadarrama han llegado en los últimos días numerosas cartas de ciudadanos que viven en la Sierra de Guadarrama o en otros municipios de la Comunidad de Madrid, todas ellas relacionadas con la situación de abandono en el que se encuentra el Palacio-Castillo de Mataespesa-Alpedrete (siglo XIX), propiedad de los Duques de Valencia, siendo María del Carmen y Martínez de Orellano, la última referencia conocida sobre la titularidad de esta finca de la que, unánimemente, se pide tanto al Ayuntamiento de Alpedrete como a la Comunidad de Madrid que acudan en ayuda de este palacete de hace dos siglos y que lleva abandonado a su suerte desde hace decenas y decenas de años.

En este sentido se han pronunciado y se siguen pronunciando, muchos de los ciudadanos que han visitado estas ruinas en los últimos años, como es el caso de ‘Albertito’, que ha dicho al respecto: “Hace 20 o 30 años, la ruina y el vandalismo aún no habían comenzado su tarea demoledora. Recuerdo colarme en el interior del Castillo cuando era un niño y disfrutar de un ‘extraño viaje’, contemplando la decoración, el mobiliario y los enseres que me evocaban a un tiempo pasado. Ayer volví y me cayó el alma a los pies…”

Anónimo: “Yo de niña también conocí el castillo de Mataespesa. Al principio estaba impecable y nos lo enseñó el Guarda Ángel, que tenía llave. Recuerdo perfectamente una cabeza de jabalí encima de una enorme chimenea y las habitaciones todavía con las camas. Los alrededores estaban más o menos bien. También recuerdo la pequeña capilla, la piscina, la pista de tenis, las cuadras… Hace mucho que no paso por allí, y prefiero quedarme con aquel recuerdo…·”, decía esta ciudadana anónima

Bajo el título ‘El día que me hice mayor’, un ciudadano que prefiere no hacer público su nombre relata, entre otras cosas, su visita a este castillo: “al que accedí a través de la urbanización de Mataespesa, dejando a un lado un poema de Antonio Machado, que estaba labrado sobre una piedra con el siguiente poema: “Y tú, encinar madrileño/bajo Guadarrama frío/ tan hermoso, tan sombrío/con tu adustez castellana corrigiendo, la vanidad y el atuendo y la hatiquez castellana/.”

El autor de esta carta-denuncia, también criticaba el abandono apreciado en su visita a la Casa Palacio de Mataespesa de Alpedrete (año 2011) y que “se encontraba ya en estado ruinoso en un paraje rodeada de vegetación, lo que parecía una escena mágica de otros tiempos si no fuera por el vandalismo que sufre, mención aparte de los guarros ‘artistas’ del grafiti, abandonando sus ‘pinceles’ en cualquier lugar menos en el contenedor de basura”, Y continuaba: “A pesar de todo, este lugar tiene algo de tradición personal, un silencioso paseo por sus restos me lleva a otros décadas y a otros modelos de vivir la vida”.

Esto es lo que opinaban quienes acudían, hace diez o quince años, a visitar el Castillo de Alpedrete-Mataespesa. Ahora, desde que El Faro del Guadarrama publicara algunos artículos sobre esta ruina histórica, sometida con nocturnidad y alevosía al más crudo vandalismo ante la pasividad de nuestras autoridades locales y autonómicas, estamos recibiendo numerosas cartas y comunicados de denuncia sobre lo que está sucediendo en este paraje, entre las cuales hemos elegido las dos últimas. La primera está firmada por Marta Rubio y en la misma dice: “Mientras Estados Unidos compran nuestros castillos, asombrados que dejemos que nuestra historia desaparezca entre el polvo de la ruina y el olvido, nosotros no hacemos NADA mientras pedazos de historia se desmoronan ante nuestra mirada ausente. Hagamos algo esta vez, nos dice Marta Rubio, y luchemos por la muralla de nuestra dignidad histórica”.

Álvaro González y Fátima Migueles exponen en sus respectivas misivas relacionadas con el abandono del Castillo Alpedrete-Maespesa. ”Muchas gracias a todos los que están interesados por este asunto. Simplemente creo que no valen excusas tales como es una finca privada y no se puede hacer nada, o que no está en manos del Ayuntamiento de Alpedrete hacer algo al respeto. La historia es nuestra y solo nuestra. Los vestigios de un pasado que hoy solamente se manifiesta en ruinas, pero si no luchamos por nada, las cosas desaparecen como la sanidad, los derechos sociales y los laborales o la historia como en el caso que nos ocupa.

Este lamentable el legado asqueroso que le vamos a dejar a nuestros hijos, a los que no miraremos a la cara para no decirles que somos nosotros, los que hemos permitido esto.

Mi carta es simplemente para concienciar a las personas de que se pueden hacer muchas cosas y creo sinceramente que en el caso que nos ocupa -Castillo de Alpedrete-, sinceramente creo que aún hay soluciones para salvarlo”.