El jefe del Ejecutivo regional, Ángel Garrido, renuncia a abordar el estatuto de expresidentes de la Comunidad de Madrid durante la actual legislatura.
Aunque se ha trabajado bastante en torno a un texto, el gobierno madrileño considera que este asunto no cuenta con el consenso que requiere entre los grupos parlamentarios de la Asamblea de Madrid, han señalado fuentes el Ejecutivo regional, que han incidido también que hay otras prioridades que afectan a los madrileños en este final de legislatura, por lo que deja esta iniciativa para el siguiente mandato.
Esta decisión afecta directamente a la expresidenta madrileña, Cristina Cifuentes, que planteó la aprobación de un estatuto para regular las condiciones en las que quedan los exmandatarios autonómicos después de abandonar el cargo. Cifuentes planteó la aprobación de un estatuto similar al existente en otras comunidades autónomas, tras la eliminación del Consejo Consultivo de Madrid.
Este organismo autonómico de carácter asesor, semejante al Consejo de Estado, lo integraban los expresidentes de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, Alberto Ruiz Gallardón e Ignacio González.
El estatuto, en su último borrador, contemplaba un sueldo para los exmandatarios del 90 por ciento de su retribución en el cargo durante los dos años siguientes a dejarlo