Deportes

El barómetro

Del sueño del ‘play-off’, al sufrimiento

JAIME FRESNO | Miércoles 22 de octubre de 2014
El CUC Villalba jugará por cuarta vez -tercera consecutiva- en Tercera División. Un logro histórico que revela las dimensiones de lo realizado esta campaña, confirmado con el 0-0 ante el Parla. En una Liga en la que los 300.000 euros de presupuesto -50 millones de pesetas- de los villalbinos no valen sino para subirse al furgón de cola, en la que ha perdido la categoría un histórico como el Pegaso, que llevaba desde 1972 entre Segunda B y Tercera, y en la que ni 150 millones garantizan optar al ascenso, como bien saben en Navalcarnero o Pinto, sobrevivir es un éxito.

Sin embargo, el hecho de que el Villalba disparase todas las expectativas cuando se puso líder en las primeras jornadas, o cuando firmó 30 puntos -casi ritmo de play-off- en la primera vuelta, deja cierto pose de decepción en el balance global. Durante los nueve meses de Liga, el club siempre mantuvo el objetivo en finalizar entre los diez primeros. Incluso Javier de Lucas habló de “fracaso” si no se conseguía, visto el rendimiento de una plantilla que terminó cediendo tras la Navidad de forma inopinada, víctima quizá de las exigencias del Grupo VII; o quién sabe. Ni siquiera la explosión goleadora de Corbella frenó una caída amortiguada por el buen rendimiento defensivo. La zaga ha sido la única línea que ha tenido regularidad, con recambios de garantías, dentro de un equipo atropellado de forma permanente por las sanciones y lesiones. Por eso, el CUC Villalba planea dar el salto de calidad reforzándose de medio campo en adelante, para que la realidad coincida con los sueños. Si puede y le dejan.