El Faro | Martes 13 de marzo de 2018
La Conferencia organizada por el Parque Nacional de la Sierra del Guadarrama y ofrecida por Leticia González, educadora de los Centros de Visitantes, ha repasado las vidas de aqellas mujeres que de una u otra forma escribieron la historia de los municipios que albergan las montañas de la Sierra, entre ellos Cercedilla.
Mujeres anónimas cuyas tareas cotidianas eran realmente duros oficios vinculados al trabajo del marido o al trabajo doméstico. Trabajos sin remunerar pero imprescindibles para la economía de subsistencia de la familia: lavanderas, aguadoras costureras, planchadoras, hortelanas e incluso porteadoras, cuando después de cocinar la comida, tenían que transportarla hasta los pinares donde se encontraban trabajando sus maridos, oficios que las mujeres pasaron a desempeñar también para otros: Con la llegada del tren en 1888, la Sierra de convierte en lugar de recreo y veraneo de la nobleza.
Mujeres ilustres
Leticia González, ha contado además que por la Historia de la Sierra del Guadarrama también pasaron muchas mujeres, ilustres, reinas como lsabel de Farnesio, cuyo cadáver pernoctó en la Iglesia de San Silvestre de Cercedilla antes de ser trasladado y enterrado en el Palacio de La Granja; escritoras como Gloria Fuertes, muy ligada a Cercedilla; deportistas como Isabel Izaguirre, socia del Real Club de Alpinismo Peñalara y primera mujer en llegar a la cumbre de Mont Blanc en 1952 y más recientemente, Blanca Fernández Ochoa, bronce olímpico en esquí en Albdertville 92, y Sandra Cantero, Campeona del Mundo de Motociclismo, en la especialidad de superenduro en 2016.
Leticia González también ha hecho referencia a muchas leyendas de Guadarrama en las que las protagonistas fueron mujeres, y a lugares cuyos nombres están escritos en femenino, como el ‘Ventorrillo de la Condesa’, entre otros.