El Faro | Domingo 17 de diciembre de 2017
Ayer, domingo, dio comienzo en el Teatro Auditorio de San Lorenzo de El Escorial el Festival de Navidad y lo hizo con una escogida oferta de espectáculos que van desde grandes clásicos como el ballet del Valle de los Cisnes o el gran concierto de Año Nuevo, hasta transgresoras propuestas del teatro visual, ópera barroca con danza aérea o teatro-
El pistoletazo de salida tuvo lugar ayer y lo dio la compañía de teatro visual Mummenschanz con el estreno ‘España de You&Me’. El resto de la programación es la siguiente: el 22 de diciembre es el turno para la compañía ‘Moma Teatre’ y la obra José K. Torturado, un texto escrito por Javier Ortiz, dirigido por Carles Alfaro y alabado por José Coronado que invita a la reflexión. La representación se convierte en una denuncia del sistema, un alegato, un manifiesto donde se establece un debate sobre el uso de la violencia como elemento de lucha política.
La compañía de ‘Blanca Li’ se subirá al escenario el 27 de diciembre. Después del éxito de Elecktro Kif, su primer espectáculo electro dance en 2010, la coreógrafa había estrenado en la gran pantalla Elecktro Mathematrix en 2016 y en 2017 propone Elecktrik, una nueva creación electro pensada para todos los públicos.
El Gran Concierto de Año Nuevo el 3 de enero
El día 3 de enero, la ‘Strauss Festival Orchestra &Ballet Ensemble’ ofrecerá el Gran Concierto de Año Nuevo. El programa inspirado en la tradicional cita musical que cada año se celebra en Viena, incluye los títulos más conocidos del rey del vals: Napoleón, Fiesta de las flores, el vals del Emperador o champagne. No faltará el vals más célebre de todos, el Bello Danubio Azul, ni la macha Radetzky que, acompañada por las palmas del público, cerrará la velada.
Finalmente el 13 de enero, la compañía ‘No Gravity Dance’ pondrá el broche final al Festival con el espectáculo Aria, que combinan arias barrocas interpretadas en directo y danza aérea. Además de disfrutar de la música, arias barrocas desde Monteverdi hasta Vivaldi y Pergolesi, los bailarines parecen estar constantemente flotando en el aire con escenografías, trajes e iluminación deslumbrantes.