La Dirección General de Seguridad de la Comunidad de Madrid ha sancionado con 6.000 euros al Ayuntamiento de Cercedilla por ‘una becerrada’ denunciada por la Asociación Nacional por la Protección y el Bienestar de los Animales (ANPBA) en septiembre de 2016.
Así consta en el escrito de la asociación al que tuvo acceso Europa Press en el que se informa que la resolución administrativa adoptada el 6 de junio de 2017 por infracción tipificada como grave en el artículo 15 de la Ley de Potestades Administrativas en materia de espectáculos taurinos.
En este tipo de tradiciones, pequeños becerros son sometidos a pinchadas y estocadas por los vecinos que participan en la lidia. Los animales acaban muriendo en el ruedo.
En el año 2016, la ANPBA interpuso una denuncia en vía administrativa ante la Comunidad de Madrid por presunta vulneración de la normativa de una ‘becerrada’ llevada a cabo en Cercedilla ese mismo mes, en la que se podrían haber conculcado diversos artículos, descritos en la denuncia de ANPBA.
El 4 de abril de 2014 el Área de Espectáculos de la Comunidad de Madrid notificó a ANPBA qué tras la práctica de las oportunas diligencias previas, con fecha 3 de abril se acordó la iniciación del procedimiento sancionador al Ayuntamiento de Cercedilla.
Ahora, ANPBA ha recibido un oficio del área de espectáculos públicos y Actividades Recreativas, dependientes de la Consejería de Presidencia de la Comunidad de Madrid, en la que se notifica la citada resolución.
Aun así el oficio no detalla los motivos exactos por los que se ha impuesto esta multa, la resolución sancionadora indica que se trata de una infracción tipificada como grave en el art.15p, de la Ley 10/1991, de Espectáculos taurinos, este artículo sanciona “el incumplimiento de las condiciones establecidas en el Art. 10 de la misma ley, que prohíbe a su vez, el maltrato de las reses por los participantes en tales festejos”. La Asociación ha aprovechado para pedir a la Presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, que se prohíban las becerradas dando con ello un paso adelante en consonancia con la “sensibilidad de la sociedad actual, contraria a los espectáculos en los que tanto sufren los animales y en los que se les utiliza como meros objetos de diversión”