Las dos ofertas estrella del gobierno presidido por el alcalde, Juan Carlos Rodríguez Osuna (VxM), es decir, la construcción de un nuevo Colegio Público que permitiera sustituir a la viejas y obsoletas instalaciones del actual (El Raso), y la de un Centro Cívico, ambos proyectos actualmente paralizados y con pocas posibilidades de poder ser reactivados a corto y medio plazo, consecuencia de los imperdonables errores cometidos por el Ejecutivo de Vecinos por Moralzarzal Participa! (VxM); en el caso de El Raso, al revocar el gobierno local el convenio firmado entre la Comunidad de Madrid por Ejecutivo presidido por José María Moreno (PP), pocos meses antes de los comicios celebrados en mayo de 2015, que contemplaba la construcción de un nuevo colegio en una parte de la Dehesa de esta localidad. Es más, el gobierno que se formó tras las citadas elecciones, presidido por Rodríguez Osuna, para impedir cualquier marcha atrás en su decisión de no ‘tocar’ la Dehesa, refrendó esta postura alquilando los terrenos cedidos por el Ayuntamiento a la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid a la Asociación de Ganaderos del municipio, al módico precio de 2.546 euros anuales, paralizando con ello un convenio ya cerrado entre Ayuntamiento y Comunidad de Madrid en el que ambas partes se comprometían a financiar las obras de este moderno complejo educativo, así el Ayuntamiento se responsabilizaba de financiar la primera fase (6 unidades de Educación Infantil, comedor escolar, sala de usos múltiples, dirección y administración), mientras la Consejería de Educación asumía el coste de las obras correspondiente a la segunda fase, referido a la construcción de 12 unidades de Primaria, además de un gimnasio.
Futuro incierto para el nuevo centro educativo
Elena Roig, Directora General de Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, en relación a este convenio, dijo: “Nosotros teníamos previsto la construcción del nuevo colegio durante el ejercicio económico de 2016, pero dado que a fecha de hoy, (Marzo de 2017), el nuevo Ayuntamiento de Moralzarzal sigue sin desarrollar la primer fase del mismo (se refería a las seis unidades de Educación Infantil…), la Consejería no ha podido llevar a cabo la continuidad del mismo”.
Además, Elena Roig, dejó claro los problemas habidos hasta ahora con el gobierno ‘VxM’. “La parcela que ellos nos han propuesto para construir el nuevo colegio, situada en la zona de Las Hachazuelas, ha sido rechazada por la Consejería de Educación ya que dicha parcela había sido adquirida por la Comunidad de Madrid, mediante una cesión supramunicipal y actualmente está inscrita en el inventario de suelo de la Dirección General de Urbanismo. Su uso, aun siendo de equipamiento público, y por ello podría ser utilizada para construir un colegio, tiene otros inconvenientes que pasan por: dar primero de baja dichos terrenos en el inventario de suelo de la Consejería de Medio Ambiente y adscribirla a la de Educación. Para ello debería llevarse a cabo una mutación demanial (un cambio de afección del bien) y el Ayuntamiento, además, tendría que justificar que no dispone de otras parcelas adicionales, puesto que existen otros usos de carácter municipal que pueden satisfacer las necesidades de suelo como, por ejemplo, la parcela 76/77.
Conclusión: que el proyecto del nuevo colegio lleva dos años parado, porque gobierno de Rodríguez Osuna ‘no tiene’ ninguna parcela’ para que en ella pueda levantarse un centro educativo que permita los niños de Infantil y Primaria de Moralzarzal, ser educados sin las precariedades actuales generadas por unas instalaciones tercermundistas. Eso sí, mientras las vacas están felices y contentas, campando por los terrenos de la Dehesa que, previamente el gobierno de José María Moreno había cedido para la construcción del futuro colegio, una ubicación por cierto mucho mejor que la de Las Hachazuelas, al estar situada aquella junto al casco urbano. La incertidumbre existente entre los vecinos de Moralzarzal sobre el futuro centro, se incrementó al conocerse que el Ayuntamiento se había gastado a principios de curso unos 350.000 euros en ‘parchear’ algunas de las deficiencias detectadas en el viejo inmueble de El Raso, lo que invita a pensar que su anunciada sustitución por uno nuevo va para rato.
Más de lo mismo con el Centro Cívico.
La otra gran obra que, junto al nuevo colegio citado, Vecinos por Moralzarzal había prometido abordar en esta legislatura, era la construcción de un Centro Cívico, cuyas obras, sin haber definido siquiera el proyecto, ni siquiera su ubicación, la tesorería municipal lo había dotado con un presupuesto de 1.4623,702 euros, de los cuales 1.170.160 correspondía a la aportación concedida por la Comunidad de Madrid, a través del PIR y los restantes 292.542 euros, serían satisfechos por las arcas municipales.
El proyecto contaba con los ingredientes necesarios para compararlo con el famoso ‘cuento de la lechera’ y lamentablemente así terminó. En el orden del día del Pleno municipal celebrado por este Ayuntamiento, el pasado 5 de abril. y en el punto referido a la ‘Modificación Presupuestaria’, vinculada con el capítulo de inversiones para el actual ejercicio, y a propuesta del Equipo de Gobierno -ahora minoritario-, formado por ‘VxM’ y PSOE, el alcalde Rodríguez Osuna propuso anular la inversión correspondiente a la construcción del Centro Cívico, “por tratarse, dijo, de una obra bastante laboriosa para acometer en el transcurso del año, ya que en caso de no ejecutarse, podría suponer la pérdida de dicha subvención”. Y propuso que el millón y medio del Centro Cívico fuese destinado a la ejecución de varias obras, entre ellas la de la Avenida de la Salud, Cubierta del Polideportivo, la sustitución de torres de alta tensión, columpios en el parque de El Raso, maquinaria para el mantenimiento de parques y jardines, la compra de un coche eléctrico…, todo ello por un importe muy similar: 1.462,148 euros. Esta propuesta fue rechazada inmediatamente por los votos por los grupos municipales de la oposición, PP y ‘MeC’, que suman mayoría absoluta. ¿Y ahora qué?, se preguntaban los vecinos. ¿Perderá el Ayuntamiento de Moralzarzal el millón doscientos mil euros concedidos por la Comunidad de Madrid, vía PIR, a la construcción de un Centro Cívico? ¿Cómo es posible que el Equipo de Gobierno haya estimado dicha cifra como coste de la construcción de este equipamiento cultural, sin tener previamente elegido el lugar en el que iba a ubicarse, ni haber elaborado el pertinente proyecto? Es más, en nuevas partidas económicas incluidas en el Pleno citado, aparecía una partida por importe de 156.000 euros, bajo el epígrafe ‘Proyecto Centro Cívico’ ¿Era esta la forma de gobernar de un Equipo de Gobierno, el del Sr. Rodríguez Osuna, legitimado en principio gracias al pacto de gobierno firmado con PSOE y Moralzarzal en Común (MeC)?. La aún reciente ruptura de dicho pacto de gobierno por parte de Moralzarzal en Común, cansados sus miembros de ver el incumplimiento continuado de los pactos, a partir de ahora obligará al alcalde, Juan Carlos Rodríguez Osuna, a tener que negociar punto por punto con la oposición, los asuntos a debatir en Pleno, algo a lo que no estaba acostumbrado. Con la actual situación, el regidor local no va a poder seguir manteniendo su política irresponsable y, en ocasiones, maleducada, lo del manido “o estás conmigo o contra mí”, sin que valieran los términos medios. Y si no que se lo pregunten a algunos políticos, funcionarios de este Ayuntamiento o, incluso, a la propia Policía Local.
Un equipamiento necesario
El Centro Cívico, cuyo futuro está ahora en peligro, junto al más de un millón de euros aportados por la Comunidad de Madrid vía PIR para dicha obra, y todo ello es consecuencia, igual que en el asunto del colegio, de la incompetencia de este gobierno. Y es lamentable la situación creada porque el Centro Cívico es un equipamiento que sí necesita Moralzarzal, sobre todo si tenemos en cuenta que su ‘coqueta’ Casa de Cultura está desbordada por carecer de la capacidad suficiente para atender la gran demanda de usuarios y este equipamiento permitiría descentralizar otros socioculturales del municipio, respondiendo así a la demanda ciudadana de este tipo de centros que aspiran a ser referenciales de ahí que su ubicación sea muy importante. Generalmente suelen construirse en el entorno de plazas o parques, donde el paso de vecinos sea continuo, siendo concebidos arquitectónicamente como edificios funcionales, con diseños dinámicos y abiertos.
Respecto a la paralización de este proyecto, hemos recibido en nuestro periódico varias cartas enviadas por vecinos de Moralzarzal mostrando su indignación y su estupor por todo lo sucedido. Hemos recogido algunos párrafos de una de ellas, firmada por José G.C, que culpa al gobierno de Vecinos por Moralzarzal Participa! de la parálisis en la que está sumido este municipio: “Osuna ha querido conducir el Ayuntamiento mirando siempre por el retrovisor y estrellándose contra los árboles. Ha intentado reescribir la historia de Moralzarzal, grave error. Ha buscado desprestigiar a sus antecesores en el gobierno local y lo que sí hemos comprobado en estos dos años de gestión, es que los componentes de este Gobierno no son ni técnicos ni políticos, como decían: son unos incompetentes a la hora de gobernar nuestro pueblo. Son unos inexpertos, con un escaso conocimiento de la gestión administrativa, algo que no nos ha pillado de sorpresa porque desde el comienzo ya intuíamos, sólo viéndoles su ‘currículum’, que iban crear un claro desgobierno y que, además, iban a incumplir la mayoría de las promesas hechas, no tan sólo respecto a su programa electoral, sino incluso en el de investidura. Y, lamentablemente debo decir que hemos acertado.”.