El grupo municipal de Galapagar en Común-IU, ha denunciado nuevamente las ‘aventuras y desventuras’ sufridas por los grupos de la oposición en lo que llevamos de legislatura en relación con los despachos municipales.
Desde comienzo de la legislatura (mayo de 2015), los grupos de la oposición estorbábamos al Partido Popular. En octubre de 2015, nuestro grupo municipal con el concejal Juan Pretel, que era quien se encontraba en ese momento al frente de este partido, acaparamos varios titulares en la prensa nacional y la TV, al denunciar la situación en la que nos encontrábamos. Con un edifico (el del nuevo Ayuntamiento) que había costado 3,5 millones de euros a todos los vecinos/as de este pueblo, resulta que la oposición no tenía cabida en él. El Partido Popular, en su ‘gracia infinita’ nos había facilitado en un descansillo, una mesa y un ordenador, para los once concejales de la oposición.
Por otra parte nuestro grupo al igual que el resto de los partidos de la oposición durante el año 2015 y comienzos de 2016, pedimos en distintas reuniones que los despachos y locales que se nos felicitaran no supusieran coste alguno para las maltrechas arcas del Ayuntamiento y que a ser posible, estuvieran ubicados en edificios municipales, preferentemente en el propio Ayuntamiento sito en la Calle Adolfo Suárez.
Hace ahora un año y tras varios meses de lucha por parte de todos los grupos de la oposición reivindicando el derecho a un espacio digno, el gobierno del PP de Galapagar alquilaba dos locales para que cumplieran la función de despachos. Esos locales tenían un coste para el Ayuntamiento de 5.808 euros anuales, a razón e 450 mensuales, mientras estos se habían estado publicitando a 150 euros mes (tenemos documentos que lo atestiguan).
Estos despachos están situados a medio kilómetro del Ayuntamiento, lo que dificultaba nuestro trabajo, pues para imprimir cualquier documento o sacar una fotocopia o hacer cualquier tipo d gestión municipal teníamos que trasladarnos hasta la Casa Consistorial.
Traslado de sede
El 14 de abril de 2016, presentamos en el registro del Ayuntamiento un escrito en el que solicitábamos la rescisión de dicho contrato porque nuestro grupo no iba a hacer uso de dicho local, solicitando a la vez uno nuevo, petición que reiteramos una semana más tarde. Al no tener respuesta y dado que teníamos que trabajar en algún sitio empezamos a utilizar dicho despacho, un local que tampoco cumplía la normativa en materia de accesibilidad, pues los despachos están situados en un edifico que, según un informe realizado por los técnicos municipales “no cumplen con las condiciones básicas de accesibilidad para espacios públicos, al impedir a las personas con algún problema de movilidad el acceder a los mismos”. Existe una normativa en cuanto a niños que obliga en todos los edificios públicos a estar adaptados para ser accesibles. Tampoco el ascensor cumplía la normativa.
Nuevos impedimentos
Y si todo esto no fuera suficiente, los despachos no tenían calefacción, lo que obliga los concejales a trabajar en invierno con abrigo o chaquetón. Y como si esto fuera poco, el Partido Popular decidió el pasado mes de enero cortar durante más de una semana la luz a dichos espacios, lo que impidió a la oposición a poder realizar su trabajo.
Recientemente nos han vuelto a quitar el programa informático con el que podíamos acceder a los expedientes municipales (el Gestdoc), y nos han vuelto a colocar en el descansillo de la escalera del Ayuntamiento el ordenador para los once concejales de la oposición, un ordenador que ‘va a pedales’ y una silla bastante incómoda.
Este mes se cumple el contrato de arrendamiento de dichos locales, de ahí que en diciembre pasado solicitáramos al Gobierno del PP que no renovase dicho alquiler y que nos buscasen otra alternativa a los actuales despachos en la plaza de Alfonso X, al no cumplir los citados la normativa de movilidad y por tanto no ser accesibles para personas con movilidad reducida.
Pedimos que el alcalde, Daniel Pérez Muñoz cumpla con su obligación y con la promesa realizada de habilitar un espacio de trabajo en condiciones dignas para los grupos de la oposición en las dependencias del nuevo Ayuntamiento, algo a lo que precisamente también se había comprometido la propia portavoz del Gobierno municipal del PP, Carla Greciano, en una entrevista concedida a Telemadrid, en la que justificó la construcción del nuevo Ayuntamiento, argumentando que en el antiguo no había espacio para albergar todas las dependencias municipales, incluyendo a los grupos de la oposición.
Curiosamente esta conejal del PP, que dimitió posteriormente, mantiene su despacho en la Casa Consistorial, igual que el resto de concejales del Equipo de Gobierno
Galapagar en Común-IU, finaliza su esta nota de prensa, pidiendo “poder trabajar en condiciones dignas en nuestro municipio y que el alcalde deje de secuestrar la democracia de este municipio y cumpla con sus obligaciones como alcalde.