El Ayuntamiento culpa a Nuevo Arpegio, pero no resuelve el problema
El Faro | Jueves 27 de octubre de 2016
El deplorable estado del firme de las calles Avenida de la Salud y Antón de Moralzarzal continua enquistado. Recordemos que el actual alcalde, Juan Carlos Rodríguez Osuna (Vecinos por Moralzarzal), incluyó ambas calles como tema prioritario de su programa electoral antes de las elecciones municipales celebradas en mayo de 2015, utilizándolo como arma arrojadiza contra el por entonces regidor. José María Moreno y prometiendo que él, cuando llegara a la alcaldía, solucionaría un problema que “estaba poniendo en peligro la seguridad de peatones y conductores que transitaban por estas vías”.
Pues bien, una vez investido alcalde, gracias al ‘cordón sanitario’ formado por otras fuerzas políticas para evitar que gobernase el PP (aún siendo esta la candidatura más votada), Osuna siguió erre que erre con el mismo asunto, pero sin buscar la solución definitiva. Pese a amagar, una y otra vez, con denunciar a la Comunidad de Madrid o llevar ante los tribunales a Nuevo Arpegio como responsable de esta obra, ya ha pasado año y medio y lo único que ha hecho el regidor moralzarceño fue emitir una nota (3 de marzo de 2015), en la que, entre otras cosas, decía: “El pavimento de la Avenida de la Salud de Moralzarzal se hunde. La culpa es de una mala ejecución del proyecto y el resultado es el siguiente: que una de las arterias fundamentales de este municipio se convierta en un potencial peligro para el tráfico rodado”, añadiendo, que “la empresa Nuevo Arpegio S.A. no ha aceptado reunirse con nosotros, ignorando así las demandas de los vecinos para que fuese arreglado un adoquinado que actualmente está gravemente deteriorado, lo que supone un grave peligro para todos los que utilizan esta vía. Por todo ello, este Ayuntamiento ha decidido emprender acciones legales contra la Dirección General de la Administración Local de la Comunidad de Madrid”
Por otro lado el PP se opuso a judicializar las relaciones entre estos dos entes públicos, sobre todo tras mantener una reunión con los responsables de Nuevo Arpegio en Madrid, donde los representantes de esta empresa mostraron su disposición a reunirse con el Gobierno moralzarceño cuanto este lo pidiera. Es más, Nuevo Arpegio insistió entonces que no le constaba ninguna solicitud de reunión por parte del Ayuntamiento, mientras el alcalde de este municipio insistía que “hasta en 20 ocasiones he intentado ponerme en contacto con esa empresa sin obtener respuesta alguna”.
Un coste de 240.000 euros
Esta obra fue recepcionada el 25 de abril de 2012 y, cuatro meses más tarde, fue cuando se empezaron a detectar las primeras anomalías, hecho que fue notificado a Nuevo Arpegio por el anterior Equipo de Gobierno. Aún así, dicen los responsables del actual Ejecutivo de Moralzarzal, hasta comienzos de la actual legislatura no se hizo nada para intentar solucionar el problema. Los principales defectos que se han detectado es la deformación del pavimento y la rotura y rotación de los adoquines. El arreglo de la obra ha sido cuantificado en 240.000 euros.
“Se han mantenido encuentros con la Dirección General de la Administración Local de la Comunidad de Madrid para que mediase en el conflicto y se ha solicitado una reunión con Nuevo Arpegio, empresa pública responsable de la coordinación de la ejecución de esta obra”, dice el Ayuntamiento, “pero hasta el momento ninguna de estas entidades se han querido responsabiliza de unas obras que ha sido mal planteadas y peor ejecutadas. La pavimentación se realizó con adoquines sueltos, que saltan peligrosamente al paso de los vehículos. El Ayuntamiento afirma que se realizan reparaciones de urgencia para salvaguardar la seguridad de conductores y transeúntes.
El Plan de Inclemencias Invernales, recientemente aprobado por este consistorio, prevé el corte (cierre) de la Avenida de la Salud en caso de nevada (nevó y heló el invierno pasado, pero aún así nunca se llegó a cerrar). “Hay que recordar, dice un responsable municipal, que el invierno pasado un autobús se quedó atravesado en esta vía. Si se llega a cierra al tráfico esto tendrá importantes efectos en el tráfico ya que se trata de una calle con mucho tráfico de vehículos”, dice el propio alcalde.
Además, el Ayuntamiento asegura que, ante la pasividad de la Comunidad de Madrid “estamos estudiando una serie de medidas legales en defensa de nuestros vecinos”.
“A día de hoy, y eso es lo más preocupante dicen los usuarios de estas calles, es que nadie se ha responsabilizado de una obra que, obviamente, ha sido pesimamente diseñada y peor ejecutada. Para su pavimentación se utilizaron adoquines sobre un firme mal compactado y carente de los materiales necesarios aguantar el paso de numerosos vehículos diarios, muchos de ellos de gran tonelaje. Y lo peor de todo es que al final, unos por otros, el problema persiste y más de cara a un invierno que está a la vuelta de la esquina, donde las condiciones climatológicas no ayudarán a evitar que los problemas se incrementen y los riesgos para los conductores y peatones que se vean obligados a utilizar la Avenida de la Salud y la Antón, donde los charcos se acumulan y los vehículos salpican no solo a los transeúntes sino a las fachadas de los edificios colindantes”. La ‘patata caliente ’ahí queda.