LA CRISIS ECONÓMICA HIZO QUE UNA BOLA DE POLIESPÁN SUSTITUYERA A LOS TOROS
Se trata de una bola de 150 kilos y tres de diámetro que persigue a los corredores cuesta abajo hasta la plaza del pueblo
El Faro | Martes 23 de agosto de 2016
“A falta de toros, buenos son ‘bolos’. Eso debieron pensar en el año 2012 los vecinos de la localidad serrana de Mataelpino que, ante la falta de presupuesto para los festejos taurinos, optaron por promover un tipo de encierros donde mozos y mozas eran perseguidos por una gran bola de espuma expansiva de unos 120 kilos de peso y tres metros de diámetro, como si fuera uno toro. Esto sucedió por primera vez en las fiestas patronales de San Bartolomé de dicho año. Pero también hubo bola para los más pequeños, de menor peso, pero igualmente emocionante. Años después se puede decir que este ‘invento’ ha llegado a todos los rincones del mundo, incluso a la propia televisión japonesa y cada año cuenta con más participantes, algo que pudimos comprobar la semana pasada en las fiestas patronales de Mataelpino, municipio que ha convertido ‘Boloencierro Mataelpino’ en su marca registrada que ha empezando ya a exportar. J.A. Aunión en el diario ‘El País’ escribía la semana pasada que “la cosa tiene su intríngulis. Al parecer hay que calcular bien la trayectoria, porque si no te pude dar un buen golpe esa gigantesca bola de poliespán de tres metros de diámetro y 200 kilos de peso que persigue cada año a los corredores. Se trata, dice el periodista, de un encierro muy parecido al que se hace con toros: vallas y protección a ambos lados de la calle, participantes amontonados que corren y esquivan, pero en lugar de animales lo que se lanza cuesta abajo es esa enorme pelota de corcho blanco”.
En el año 2011, los vecinos de Mataelpino -según el alcalde Miguel De los Nietos, en plena crisis económica al carecer de presupuesto para poder celebrar los tradicionales encierros taurinos en sus fiestas de agosto, se negaron a quedarse sin encierros, así que a falta de toros se recurrió al poliespán y a la geografía inclinada de esta localidad. “Desde entonces lo que empezó por sorpresa no sólo ha ido ganando aficionados y notoriedad, sino que se ha convertido en la ‘marca turística’ de este pueblo. Así, desde hace unos meses ‘BolonecierroMataelpino’ es una marca registrada que se está empezando a exportar. Y además cuenta con una versión para niños que se practica con bolas más pequeñas y mucho más ligeras, fabricadas con formas irregulares para que vayan dando saltos y sea más divertido. En este caso el peligro no es que te pille la pelota, sino acabar por los suelos con un buen raspón y entre tropezones y empujones de la chavalería. La recomendación es que los pequeños corran con pantalones largos y camisas de manga larga, dice el alcalde socialista de El Boalo, Cerceda y Mataelpino.
Compatible con los toros
Estos particulares encierros son compatible con los tradicionales de reses bravas. Mataelpino celebra uno nocturno, que se suma a los tentaderos para los alumnos de la Escuela Taurina de Madrid y una suelta de reses para ‘solteros y casados’ y otra suelta de vaquillas para aficionados. “El Boloncierro no es algo que separe, sino que une taurinos y antitaurinos”, dice el alcalde de El Boalo, Cerceda y Mataelpino.
Los que han corrido estos dos tipos de encierros dicen que “Con la bola lo que te sientes es muy pequeñito, Además hay que estar muy atento y no dejar de mirar para atrás, porque los golpes del ‘boloncio’ pueden hacer mucho daño, sobre todo si te empujan contra las tablas, las vallas o contra el suelo, cuando en el peor de los casos sufren fuertes traumatismos en la cabeza que después requieren varios días de observación, de hecho suele haber más heridos en el ‘Boloncierro’ que en los de toros, supongo que es porque en este último la gente está más preparada. Este año han sido cuatro los heridos corriendo delante del poliespán, dos de ellos tuvieron que ser trasladados al hospital, pero afortunadamente ya se encuentran bien”, dijo De los Nietos.
Este verano van a disfrutar de este espectáculo, versión infantil, los municipios de Torrelaguna (3 de septiembre), Cercedilla (10 de septiembre), Navacerrada (11 de septiembre) y Moralzarzal (1 de octubre).