El Faro | Martes 14 de junio de 2016
Dos agentes de la Guardia Civil de Las Rozas evitaron, la semana pasada, que un hombre de 61 años se suicidara colgándose de una cuerda en un panel luminoso de la Autopista de La Coruña (A-6), a la altura de Las Rozas. Los hechos ocurrieron cuando, sobre las 7,40 de la mañana, un vecino de esta localidad denunció a la Guardia Civil que estaba viendo a un hombre situado encima de la pasarela de la autovía, siendo tras ello enviada una patrulla al lugar de los hechos. Los agentes comprobaron la veracidad de la denuncia: un hombre se había colocado el extremo de una cuerda con un nudo corredizo alrededor del cuello, mientras la otra punta estaba amarrada a la estructura metálica del panel.
Mientras uno de los agentes trataba de tranquilizar al hombre, el otro continuó por el lateral de la autovía sin ser visto por el supuesto suicida, hasta encaramarse a la estructura metálica y desde ahí acceder a una escalera, situada en el poste del panel. “¡no quiero vivir, no quiero vivir!”, no paraba de decir el hombre que se negó hasta en tres ocasiones, a deponer su actitud.
El guardia civil tras subir a la parte posterior del panel se acercó al presunto suicida y logró convencerle de que se quitara la cuerda del cuello. El hombre se derrumbó y se echó a llorar. Poco tiempo después, ambos agentes lograron que bajara y ya en el suelo fue atendido por los facultativos de una ambulancia que se había desplazado al lugar.
El presunto suicida nació en Cádiz, está divorciado y tiene tres hijos. Se encuentra en paro y, según dijo, no tenía ganas de vivir.