Toros sí, toros no

El debate en España sobre corridas de toros sí; corridas de toros no, va en aumento, provocando incertidumbre y preocupación entre los aficionados al arte de Cuchares. Muchos municipios de la Comunidad de Madrid no son ajenos a este problema, sobre todo tras los resultados de las últimas elecciones municipales y la posterior configuración de los respectivos gobiernos locales donde, según el signo político del alcalde o el del nuevo equipo de gobierno, habrá o no festejos taurinos. Las formaciones de izquierda, sobre todo aquellas encabezadas por “Vecinos por...”, han sido hasta ahora las menos proclives a fomentar la fiesta nacional ¡faltaría menos!, incluidos encierros, y esto ha quedado sobradamente demostrado en municipios como San Lorenzo de El Escorial, Colmenarejo y Moralzarzal, entre otros, tal como les mostramos seguidamente. Por ejemplo, en San Lorenzo de El Escorial, por segundo año consecutivo, no habrá toros, ni siquiera se celebrará la tradicional corrida del 10 de agosto, fiesta del patrón, y esto va a suceder pese al voto en contra del Partido Popular, Ciudadanos y AME (mayoría de votos) en el último pleno, anulando la decisión tomada por el Ejecutivo presidido por Blanca Juárez (Vecinos por San Lorenzo), apoyado por sus socios de gobierno (PSOE, Si Se Puede e IU), que eran los minoritarios. Y aún así, al final se saldrá la izquierda con la suya y no se celebrará la tradicional corrida de San Lorenzo porque, según el empresario Tomás Entero, el Ayuntamiento, entre otra muchas trabas, solo aportaba al festejo el gasto del camión del riego del coso de la plaza y la banda de música, negándose incluso a comprar un paquete de entradas que el consistorio local venía adquiriendo todos los años (fuese de una u otra ideología el alcalde de turno), que después eran ofrecidas a bajo coste a los jubilados del pueblo, un gesto que costaba a las arcas municipales unos 18.000 euros. De ahí la suspensión de esta corrida de toros. “A última hora quisieron dar marcha atrás- dijo Entero- pero ya no había tiempo”
Colmenarejo hizo una encuesta
En Colmenarejo, donde gobierna el Partido Popular con el apoyo de Vecinos por Colmenarejo, fue esta formación quien promovió por su cuenta y riesgo una encuesta entre los ciudadanos para conocer su posicionamiento acerca de los festejos taurinos. Por menos de medio centenar de votos salió el ‘no’, lo que hizo que la alcaldesa popular, Nieve Roses, dijera que este pronunciamiento no sería vinculante. Apenas una semana más tarde tuvo que rectificar, presuntamente presionada por su socio de Gobierno (los dos 2 ediles de Vecinos), hecho que intentó justificar “por una cuestión de tiempo”, dijo “Los festejos no se hacen de la noche a la mañana. No hemos podido realizar los trámites pertinentes para tener listo el festejo en la fecha prevista. Y si tienen que echar la culpa a alguien, indicó Roses, la decisión ha sido de la alcaldesa”. Después, a lo ‘pilatos’, quiso ‘lavarse las manos’ diciendo: “Estoy dispuesta a dar todo tipo de explicaciones a los pro-taurinos que no entiendan la decisión que hemos adoptado. Pero también les pido que, en adelante, defiendan su postura con ahínco” .

Y esto fue lo que hicieron el pasado año los vecinos de Moralzarzal que, en cuanto tuvieron conocimiento de la idea por parte del alcalde, Rodríguez Osuna, de intentar suspender los festejos taurinos que se celebran, año tras año, durante la segunda quincena de septiembre en este municipio, le mandaron un claro mensaje en el que más o menos le decían que “por ahí no iban a pasar”. Al final todo quedó en un tenso tira y afloja, donde los partidarios de la fiesta nacional, una gran mayoría de los 12.000 habitantes de un municipio que, además cuenta con una de las plazas de toros cubiertas más bonitas de España, aceptaron eliminar la novillada sin picadores y los encierros infantiles. Pero ya hay rumores sobre si el Equipo de Gobierno, en la feria de este año, intente bajar la calidad de las ganaderías y los novillos de prestigio que acuden año tras año a este coso.

Una fiesta con diez siglos de vida
La fiesta nacional se inició en nuestro país en el siglo XI y el debate sobre la tauromaquia no es de ahora, sino que desde sus comienzos las corridas de toros han despertado vivas polémicas entre partidarios y detractores, pero ahora se han politizado y la polémica ha llegado a la puerta de los Ayuntamientos y por tanto, hasta la mal denominada clase política
Para muchos españoles las corridas de toros son la historia viva de nuestro país y durante siglos han contado con el beneplácito de la mayoría de los que aquí residimos. La tauromaquia es un símbolo y una marca de España, arte y cultura, se quiera aceptar o no. Francisco de Goya lo puso de manifiesto en sus cuadros y Federico García Lorca, tras piropear la fiestas en sus versos, llegó a decir: “El toreo es probablemente la riqueza poética de España. Creo que los toros es la fiesta más culta que hay en el mundo, increíblemente desaprovechada por escritores y artistas españoles debido, sobre todo, a una falsa educación pedagógica que nos han dado”.

Y como el tema de la fiesta está cada día más politizado, o al menos eso es lo que se dice, ahí está el nada sospechoso, ideológicamente hablando, Joaquín Sabina, y que siempre se ha caracterizado por llamar al pan, pan y al vino, vino, confesándose admirador de nuestro paisano José Tomás y, sobre todo, defensor de la libertad individual para ir o no a las corridas de toros. Y al respecto ha dicho: “El que no quiera ir a los toros que no vaya. Y que dejen de tocar los cojones, que hay cosas más importantes. Pero que no hablen de ecología, ni de amor a los animales, porque no conozco a nadie que los ame más que los ganaderos y los toreros”. Y añadió: “Si yo fuera animal, me gustaría ser toro de lidia: a ninguno se le respeta más. Ninguno está mejor tratado”.