El PP regional guarda silencio tras el cambio de candidato en Galapagar

Hay una frase del alcalde y ya ex candidato del PP en Galapagar, José Luis González, que resume bien la situación que se ha vivido durante los últimos días: “El viernes pasado se pusieron en contacto conmigo para solicitarme la fotografía que sería mi imagen en la campaña electoral. Aunque, paradójicamente, el sábado a primera hora de la mañana corría de boca en boca por todo el municipio la noticia de que yo ya no era el candidato y que existía otra lista que estaba siendo elaborada en bares y locales del pueblo”. Efectivamente, el sábado era un rumor; el domingo tomó forma; y el lunes por la mañana llegaba la primera confirmación de forma oficiosa: Pablo Gómez Díaz sería el cabeza de lista de los populares.Un desconocido en la política local sobre el que a cuentagotas fuimos sabiendo algunas cosas: 31 años, juez de paz en Galapagar hasta hace unos meses, hermano del chofer de la cuadrilla del torero José Tomás... Y poco más. Tampoco desde Génova han ofrecido más datos sobre él.

Ha dominado un silencio rotundo que tampoco conseguimos romper cuando el miércoles a mediodía, una vez que las candidaturas se habían publicado en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid, hablamos con el propio Pablo Gómez, quien prefirió no hacer declaraciones, remitiéndonos a una próxima comparecencia ante los medios que aún no tiene fecha. En cuanto al hecho de que al parecer no esté afiliado al PP, simplemente nos remitió a los requisitos que debe cumplir un juez de paz para acceder al cargo, entre los que, efectivamente, se encuentra el de no militar en ningún partido político, ya que se trata de un puesto que se integra plenamente en la estructura judicial.

Tampoco desde el PP regional se han ofrecido explicaciones sobre este asunto. Desde el principio se descartó que el secretario general de los populares madrileños, Francisco Granados, terciase en la polémica, si bien se dejó la puerta abierta a que lo hiciese el director general de Cooperación con la Administración Local, Jaime González Taboada. Sea como fuere, al cierre de esta edición de El Faro del Guadarrama ningún cargo del Partido Popular se había pronunciado al respecto.

Un secreto a voces
Desde hace semanas, las discrepancias en el PP galapagueño eran un auténtico secreto a voces. Era casi público que había dos listas: una presentada por José Luis González y otra por el presidente local del partido, a quien el regidor citó con nombre y apellidos -y también con cierto detenimiento- en su comparecencia del pasado miércoles por la tarde: “La sombra de José Tomás Román Capelo continúa reinando sobre el destino de todos los vecinos”. En la candidatura respaldada por éste no figuraban los actuales concejales Amalia Fernández, Herminia Greciano y Santiago San Martín, tres de los fieles a José Luis González junto a Juan José González Colinas, quien tampoco figura en la lista final del PP. Y el todavía alcalde parece que sí quería contar con ellos como personas de confianza. Sí aparecen entre los 11 primeros (el número que marca la mayoría absoluta) cinco de los seis ediles que hace un mes no asistieron al pleno, dejando al grupo popular en minoría: Concepción Martínez (2), Elena Montoya (3), José Luis Bautista (5) -quien poco antes había anunciado su intención de no figurar en la lista para estos comicios del 27 de mayo-, Fernando Arias (7) y Pedro Hernández (9). Entonces convocaron una rueda de prensa, denunciando falta de información, especialmente en algunas áreas, y desvinculando su decisión del proceso de elaboración de las listas electorales.

También figuran en la zona de salida de la candidatura Dolores Fernández, Carla Isabel Greciano, David Santos y Carlos Gómez Díaz, además de Daniel Pérez, quien fue protagonista hace unos meses de uno de los primeros episodios de esta lucha interna, cuando fue designado candidato por la Ejecutiva local del PP, si bien entonces Génova rectificó, nombrando a José Luis González, que incluso llegó a ser presentado el 30 de noviembre de 2006 en un acto que tuvo lugar en Majadahonda y que contó con la presencia de la propia presidenta regional, Esperanza Aguirre. Como cabeza de lista figuraba en la web del PP madrileño (www.ppmadrid.es) este mismo lunes, con una amplia carta a los vecinos, si bien en la mañana de ayer ya aparecía el nombre de Pablo Gómez Díaz, aunque sin fotografía ni ninguna otra referencia.
‘Suicidio electoral’
Antes de llegar a este punto ya se habían vivido las primeras escaramuzas con la retirada de competencias a José Manuel Martín, responsable de Cultura, quien ahora encabeza la candidatura del Centro Democrático Liberal (CDL), lo que unido a esta grave crisis en el PP puede derivar en una división del voto de centroderecha. Fuentes del propio Partido Popular consultadas por este medio también han mostrado su sorpresa por esta situación, que calificaban como “incomprensible”. Algo parecido ocurría hace unos días en Collado Villalba, aunque con una diferencia fundamental: allí estaban en la oposición mientras que en Galapagar gozaban de una cómoda -aunque finalmente tortuosa- mayoría absoluta. Panorama que, según estas mismas fuentes, puede cambiar tras el 27-M, hablando incluso de un suicidio electoral del PP galapagueño. Un debate que también se ha trasladado al foro de la edición digital de este periódico (www.elfarodelguadarrama.com), ya que desde el lunes se han multiplicado las opiniones sobre el tema.

Actuación irresponsable
Mientras, desde el principal partido de la oposición, el PSOE, su portavoz y candidata, Carmen Toledano, indica que estos acontecimientos “vienen a confirmar la crisis interna que sufre el Partido Popular desde hace tiempo”, indicando que este cambio de cabeza de lista in extremis “ha dejado sin capacidad de respuesta al actual alcalde”. “Es una manera de hacer las cosas que no responde a un proceso democrático; se ha hecho manu militari, que es la mano negra de José Tomás”, añadía Toledano. Por otra parte, denunciaba una vez más que esta crisis se ha traducido en “desgobierno y parálisis administrativa”. “El PP ha actuado de una manera irresponsable al repercutir sus discrepancias internas en una situación de desgobierno, y los ciudadanos son los perjudicados”, señalaba. Tampoco ocultaba que los socialistas pueden ser a la postre los grandes beneficiados de esta división en la familia popular: “Parte del electorado del PP puede mostrar su rechazo a esta actuación no acudiendo a votar o bien derivando sus votos a otros partidos, y la única alternativa seria y responsable desde hace tiempo es la del PSOE”, concluía Toledano.