El Faro | Lunes 23 de febrero de 2015
Han pasado seis años desde que se abriese al tráfico el remodelado eje de Honorio Lozano y Batalla de Bailén, un proyecto millonario e innecesario que aún continúa dando quebraderos de cabeza al Ayuntamiento. No se trata únicamente de la losa que las arcas municipales han de soportar durante décadas en forma de canon, sino que las deficiencias de la obra son más que notables, obligando al Ejecutivo a actuar más pronto que tarde. En este sentido, el Equipo de Gobierno ha decidido asfaltar la vía ante los importantes problemas que presentaba el adoquinado, con unas ondulaciones que algunos puntos son verdaderamente notables, dificultando la circulación y aumentado el ruido y las molestias a los vecinos. Y todo ello, recordemos, en una obra cuyos plazos se fueron retrasando una vez tras otra, al tiempo que el coste pasaba de 20 a 40 millones; un despropósito cuyas dimensiones se van agrandando con el paso del tiempo al comprobar de qué manera tiró el anterior Ejecutivo el dinero de todos los villalbinos.
Por otra parte, y aprovechando que se ejecutaba esta actuación, el Ayuntamiento ha tenido el acierto de contemplar la creación de una nueva estación de bombeo en la plaza de España, con el fin de atajar los recurrentes problemas que se producen cuando hay precipitaciones de cierta entidad.