El Faro | Jueves 15 de enero de 2015
El estreno esta semana en Galapagar de las nuevas instalaciones deportivas (un campo de fútbol 7, tres pistas de pádel y una de hockey) viene a subrayar el esfuerzo que se está haciendo en esta materia, precisamente en una época en que los ayuntamientos no pueden permitirse grandes alegrías económicas. Lejos quedan aquellas épocas de proyectos de dudosa necesidad, como el velódromo que en su día levantó el PSOE sin contar con la necesidad de una cubierta que permitiera su utilización durante todo el año. De estas recién inauguradas pistas se beneficiarán cada semana cientos de usuarios -muchos de ellos niños-, sin que para ello se haya tenido que realizar una inversión millonaria. Se trata de algo tan sencillo como emplear el sentido común, aprovechando el espacio de la antigua piscina de verano (está previsto que las obras de la nueva comiencen próximamente en la zona de San Gregorio) para construir aquí este nuevo equipamiento, que viene a completar y centralizar la amplia oferta del polideportivo municipal, poniendo la guinda a una legislatura en la que se han ido completando las instalaciones deportivas en distintos puntos de Galapagar. Pero más allá de las inauguraciones, el dato más significativo es que en estos últimos meses se ha multiplicado por tres el número de usuarios, que superan ya los 2.300 mensuales, confirmando el acierto de apostar por el deporte.