ALFREDO FERNÁNDEZ | Viernes 26 de diciembre de 2014
La próxima feria de Valdemorillo tiene todavía un nudo por deshacer. Aunque el pasado viernes ofrecíamos un avance de la estructura del serial y de las intenciones que el empresario Tomás Entero había dejado caer en un portal taurino, la realidad en este momento parece bien distinta. Por este motivo, la elaboración de la feria de San Blas se encontraría en stand-by, aunque el de Colmenarejo sigue moviendo sus fichas para que se desarrolle el ciclo que pretende, siempre desde el ahorro presupuestario y jugando con el factor tiempo, que también sopla a su favor.
Varias fuentes consultadas sostienen que el adjudicatario del inmueble, José Antonio San Román estaría barajando la posibilidad de renunciar a la concesión que se mantiene vigente con el Ayuntamiento para la explotación del coso de La Candelaria. Las hipótesis son diversas. El empresario podría buscar una salida inmediata, con una indemnización económica, aunque esto es algo que aún tendría que resolverse. Por otra parte, parece que el constructor tampoco habría cumplido todos sus compromisos con el Ayuntamiento, y precisamente en ese punto es donde podrían entrar en confrontación las partes. Sea como fuere, a San Román le interesa poco seguir con Valdemorillo. Ahora tiene una empresa con otro nombre y la salida de Tomás Entero podría ser una realidad dado que no existe un contrato firmado con el Ayuntamiento para organizar el serial.
Un nuevo cambio en la gestión de la feria sería lo más razonable, también lo más rentable, pero justo en este punto entra el criterio del Consistorio, sin que de momento se conozca la dirección que pretende tomar. Por otra parte, cabe recordar que la empresa Edisan, responsable de la construcción y explotación de la plaza de toros, se encuentra en estos momentos en concurso de acreedores, por lo que tendrían que ser técnicos jurídicos los que deberían pronunciarse sobre la relación contractual que todavía mantiene con el Consistorio de Valdemorillo, ya que todavía quedan varios años de concesión por delante.
Lo más fácil es que todo esto no se resuelva antes de la celebración próxima feria, ya que los administradores judiciales pueden tardar en pronunciarse, lo que daría como resultado que nada pueda variar antes de febrero de 2015 y todo siga con relativa normalidad, aunque la intención de José Antonio San Román, volcado en otros negocios, es llegar a posibles acuerdos.