El Faro | Lunes 22 de diciembre de 2014
Un hombre y una mujer de entre 50 y 60 años fallecieron el pasado lunes en su vivienda, ubicada en los bloques del Pontón de la calle Real de Collado Villalba, por inhalar monóxido de carbono que con toda seguridad provenía de una mala combustión de su caldera, que se encontraba encendida -junto con un fuego de la cocina- en el momento en el que los servicios de emergencias encontraron sus cuerpos.
Los compañeros de trabajo del hombre fallecido, pertenecientes al área de Deportes del Ayuntamiento de Collado Villalba, fueron los que dieron la voz de alarma avisando a los familiares de la pareja al comprobar que éste no había aparecido en su puesto de trabajo ni contestaba a las llamadas a su teléfono móvil.
Cuando los servicios de emergencias llegaron al domicilio sólo pudieron certificar la muerte de la pareja, que se encontraba en la cocina del inmueble.
Hasta el lugar de los hechos también se desplazaron efectivos del cuerpo de Bomberos, que ventilaron la vivienda y realizaron mediciones de este gas, para dar paso a los médicos del SUMMA, que confirmaron el fallecimiento de la pareja sin posibilidad de reanimación, ya que las víctimas habían muerto varias horas antes.
Los cadáveres fueron sacados del domicilio sobre las 12.15 horas, ante la mirada de algunos vecinos que curioseaban por las inmediaciones de bloque y de algunos amigos de la pareja.
La Guardia Civil está investigando los hechos, pero las primeras hipótesis apuntan a que la mujer se desmayó mientras estaba cocinando por la intoxicación de monóxido de carbono, lo que provocó que su pareja acudiese a ayudarla, aunque finalmente también se desplomó.
Tras conocerse los hechos, la concejala de Seguridad Ciudadana, Inés Berrio, ha manifestado que tanto los trabajadores como los miembros de la Corporación municipal se encuentran “consternados por la muerte de la pareja, ya que el fallecido era muy querido en el Ayuntamiento, donde llevaba trabajando más de 20 años”.
Extremar las precauciones
Berrio ha pedido a todos los vecinos que extremen la precaución con el uso de las estufas y calderas, y ha recordado que hace apenas dos semanas una familia -el matrimonio y sus dos hijas menores- tuvo que ser atendida en una vivienda de Collado Villalba por inhalar monóxido de carbono, aunque afortunadamente en su caso las intoxicaciones fueron de carácter leve.
Hasta la vivienda también se acercó la alcaldesa, Mariola Vargas, que se puso a disposición de la familia de los fallecidos para prestarles la ayuda que necesiten.