Editorial

La historia se repite en Alpedrete

El Faro | Lunes 24 de noviembre de 2014
Alpedrete vuelve a ser noticia esta semana como consecuencia de los altercados del pasado domingo, cuando una manifestación contra el racismo convocada por varios colectivos de extrema izquierda se topó con la contramanifestación organizada por grupos de ultraderecha. Afortunadamente, la intervención del Grupo de Reserva y Seguridad de la Guardia Civil evitó el enfrentamiento directo, lo que habría provocado una situación de alto riesgo en el mismo centro de la localidad. Pero más allá de este hecho concreto, la oposición ha vuelto a hacer hincapié en la existencia de un problema ante el que el Ejecutivo que preside Marisol Casado muestra una preocupante pasividad. Tal como ya hemos señalado desde este espacio en anteriores ocasiones, la innegable presencia de grupos de ideología neonazi requiere actuar con contundencia y sin mirar hacia otro lado, como muchas veces está ocurriendo en este municipio serrano. Los incidentes se repiten periódicamente, en esta ocasión acudiendo con la intención de responder a la protesta -autorizada por la Delegación del Gobierno- de diversos grupos antifascistas. Mal harían los responsables municipales en mantener el actual silencio ante este tipo de situaciones, ya que lo que hacen realmente es alimentar la fuerza de los ultras. No se trata únicamente de las múltiples pintadas que afean el espacio urbano, sino de luchar sin matices contra la violencia, mostrando ‘tolerancia cero’ y evitando una imagen que Alpedrete en ningún caso se puede permitir.