El consejero Borja Sarasola, con la alcaldesa collaína, María Rubio, ante el alcornoque de la Dehesa de la Jara (Foto: C. M.)
Entre las incorporaciones destaca el alcornoque de la Dehesa de la Jara en Collado Mediano
El Faro | Miércoles 19 de noviembre de 2014
La Comunidad de Madrid se ha convertido en la región española con mayor densidad de árboles singulares y en la de mayor diversidad de especies entre estos ejemplares. La última revisión del Catálogo de Árboles Singulares ha supuesto la inclusión de 69 nuevos ejemplares pertenecientes a 10 especies distintas y la descatalogación de 43 que habían perdido su singularidad, lo que se traduce en una ampliación en un 10%, con un total de 283.
La Comunidad de Madrid se ha convertido en la región española con mayor densidad de árboles singulares y en la de mayor diversidad de especies entre estos ejemplares. La última revisión del Catálogo de Árboles Singulares ha supuesto la inclusión de 69 nuevos ejemplares pertenecientes a 10 especies distintas y la descatalogación de 43 que habían perdido su singularidad, lo que se traduce en una ampliación en un 10%, con un total de 283.
“Estos ejemplares simbolizan los elementos más representativos de nuestra biodiversidad y constituyen un patrimonio genético que es necesario conocer y conservar. Las peculiaridades climáticas y geográficas de Madrid y el trabajo desarrollado por el Gobierno regional a lo largo de los últimos 20 años permiten hoy que los madrileños podamos gozar de uno de los catálogos más sobresalientes de España”, manifestó el consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Borja Sarasola, quien asistió este miércoles a los trabajos de estudio y medición del Alcornoque de la Dehesa de la Jara, localizado en Collado Mediano. Se trata de un ejemplar perteneciente a una especie poco habitual en la región, con una edad aproximada de 300 años y un perímetro de 6,3 metros.
Bajo la figura de árboles singulares se recogen los ejemplares de flora de características extraordinarias que por su rareza, excelencia de porte, edad, tamaño, significación histórica, cultural o científica constituyen un patrimonio merecedor de especial protección.
La existencia de una extensa franja montañosa formada por las sierras de Guadarrama y Somosierra ha permitido la conservación de bosques primigenios y de ejemplares de gran interés, en muchos casos por las dificultades de acceso y de aprovechamiento por parte del hombre. También ha contribuido a esta diversidad el asentamiento durante siglos de la Corte española, que gustó de grandes espacios ajardinados y fincas de recreo que aseguraron la conservación de algunas especies y la plantación de otras traídas de los territorios de ultramar.
Los municipios que acogen mayor número de árboles singulares son Madrid (61), Aranjuez (30), San Lorenzo de El Escorial (19), Lozoya del Valle (14) y Montejo de la Sierra (13). De todos ellos destaca el Tejo del Arroyo de Barondillo, ubicado en Rascafría y con una edad estimada superior a los 1.300 años, lo que le convierte en el ejemplar arbóreo más viejo de la Península. Además, la Secuoya Gigante de la Casita del Príncipe, en El Escorial, es el de mayor perímetro de tronco, con 9,2 metros.