Collado Villalba

Vías Pecuarias ordenó el cierre definitivo de la polémica estación de servicio de la M-608

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La Comunidad de Madrid, en el ejercicio de su prerrogativa de recuperación de la posesión de las vías pecuarias indebidamente ocupadas y tras la apertura del pertinente expediente, ordenó, después de 20 años de actividad, el cierre de la gasolinera ubicada en la M-608, en término municipal de Collado Villalba, y que durante dos largas décadas ha estado ocupando ilegalmente parte de la Cañada Real Segoviana, la más importante de las 1.670 vías pecuarias que existen en nuestra región. Según ha podido saber El Faro del Guadarrama, además del cese de la explotación, Vías Pecuarias también ha requerido a los concesionarios de la estación a que procedan de inmediato a la demolición de dichas instalaciones y a la rehabilitación de la zona ocupada.


Hace poco más de un año (22 de abril de 2013), en estas mismas páginas nos hacíamos eco de la preocupante situación de abandono que ofrecían estas instalaciones después de un cierre precipitado, algo que no pasó desapercibido para los miles de usuarios que circulan a diario por esta carretera comarcal que une Collado Villalba con Moralzarzal. Muchos se preguntaban cómo era posible que una gasolinera de estas características pudiera estar abandonada a su suerte. Se culpó, primero, a la crisis económica y posteriormente al descenso del consumo de los combustibles. Incluso se llegó a comentar la posibilidad de que el cierre estuviera relacionado con un contencioso judicial. Sin embargo, a medida que el tiempo iba pasando su abandono llegó al extremo de convertirla en una de las peores imágenes que podría ofrecer al visitante nuestra comarca, una ‘postal’ que sólo merecía la atención de los chatarreros que, noche tras noche, se encargaban de ‘adelgazarla’ ante la supuesta pasividad de los agentes de la Policía Local villalbina y de la Guardia Civil. Su respuesta fue contundente: “Hasta ahora nadie ha presentando denuncia. Y si no hay denuncia no podemos intervenir”. Nuestras pesquisas nos llevaron a intentar averiguar a través de los Juzgados de Collado Villalba, por ser estos los que tienen jurisdicción sobre los litigios que se produzcan en este municipio, para intentar saber si existía algún mandamiento judicial que recogiese el embargo de dichas instalaciones, sin éxito alguno. Los meses pasaban y la fantasmagórica gasolinera seguía cerrada a cal y canto. De los surtidores ya no quedaba más que el esqueleto, el lavado de vehículos se había convertido en un chasis retorcido y la antigua cafetería -como de las tiendas- no era más que un espacio abandonado. Meses más tarde, la que antaño había sido una concurrida estación de servicio, presentaba un aspecto desolador.

Las visitas de los curiosos tocaron a su fin cuando hace apenas un año una máquina excavadora colocó piedras y bloques de hormigón de gran tamaño en los accesos de la misma, para impedir el paso a los conductores que gustaban de hacer aquí, sobre todo los fines de semana, un alto en el camino con foto incluida. Pero no hizo el mismo efecto entre los amigos de lo ajeno, que siguieron noche tras noche con sus tareas de despiece.

Fue en el año 1993 cuando los colectivos ecologistas denunciaron ante Vías Pecuarias las dos licencias concedidas por el Ayuntamiento de Collado Villalba, presidido por entonces por el socialista Carlos Julio López. La primera contemplaba la construcción de una estación de servicio en los dos márgenes de la comarcal M-608, pertenecientes a la Cañada Real Segoviana. La segunda le otorgaba a la empresa PRYCA (hoy Carrefour), propietaria por entonces del Centro Comercial Los Valles, licencia para construir un parking en superficie en esa misma vía pecuaria, terrenos que la Comunidad de Madrid había alquilado previamente a la citada mercantil y que, posteriormente, le vendió, hecho que provocó una gran manifestación de ecologistas por las calles de nuestra ciudad.