Editorial

El regreso de José Tomás

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Ya no es rumor. Es una realidad confirmada. Un espadazo en todo lo alto del escalafón taurino. Vuelve José Tomás, el diestro de Galapagar que durante años fue sinónimo de quietud, pureza, riesgo, de pisar terrenos inalcanzables para la gran mayoría. La noticia se filtraba en la tarde de ayer y de inmediato supone un vuelco absoluto en la temporada taurina. Reaparecerá en Barcelona. Era la noticia más esperada por los aficionados de la Sierra y en general por los de toda España, que quizá sólo habían encontrado en Alejandro Talavante una figura con la proyección del torero galapagueño, que desde hace meses está entrenándose en México. Se trata sin duda de un auténtico acontecimiento, un anuncio que llega precisamente en un momento en que la polémica por las declaraciones de la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, está más que servida. Y lo es porque el regreso de José Tomás es también el de quien resucitó el toreo como un arte. Dicen que segundas partes nunca fueron buenas, aunque en este caso hasta ahora sólo hay motivos para decir que estamos de enhorabuena.