Toros

Campano triunfa con Morenito y López Simón en Las Navas

ALFREDO FERNÁNDEZ | Miércoles 22 de octubre de 2014
Julio Campano, natural de la localidad abulense de Las Navas del Marqués, pero residente en Collado Villalba durante muchos años, regresó a los ruedos el pasado miércoles. Campano cortó dos orejas y le acompañaron en la salida por la puerta grande López Simón y Morenito de Aranda, que lo hizo a pie por fallar con el acero, pero tuvo momentos muy brillantes en tarde de lleno en los tendidos y donde se lidió una corrida muy bien presentada de Carlos Charro y de buen juego donde el último toro fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre.


Julio Campano desorejó a su primer oponente tras un buen tercio de banderillas, con un par notable por los adentros y una faena muy entregada y con mucha decisión. No se dejó ganar la pelea en ningún momento y firmó series de buena factura por los dos pitones a un toro de buena condición. Aseguró el triunfo con una estocada efectiva y a pesar de la inactividad se le vio a buen nivel. El cuarto fue un toro muy ofensivo y más complicado. El menor de los Campano puso deseos y ganas de agradar, pero la papeleta no era fácil y tampoco anduvo bien a espadas. Cumplió de forma muy digna en su vuelta a vestir el oro.

Momentos de clase
Morenito de Aranda lanceó espléndidamente bien de capa a su primer toro. El burgalés lo maneja como pocos y hubo calidad y buen juego de brazos con una media verónica de cartel. El toro fue noble, aunque le faltó empuje y el torero dejó momentos de clase y se sintió muy a gusto. Cortó un trofeo tras una estocada. El quinto fue un astado flojo, pero Morenito realizó una faena sintiéndose, despaciosa, templada y donde se le vio inspirado en varias fases. Toreó con mucho reposo y su quehacer estuvo presidido por el buen gusto. El toreo de Morenito luce en otro tipo de escenarios. La espada no acompañó, por lo que perdió su salida en hombros.

Mal con la espada
López Simón pudo haber cortado cuatro orejas de no fallar repetidamente en su primero. El madrileño tiene posibilidades y debe engancharse al carro del éxito. Esta vuelta debe darle moral a continuar en la brecha. La faena al sexto fue excelente, con momentos de mucha naturalidad, dejando el trapo muy en la cara en una faena muy ligada ante un toro con mucha clase de Charro. La faena caló mucho a pesar de pinchar varias veces, llevándose el doble trofeo. A su primero, el de Barajas también le había realizado una faena brillante, algo más atacada, pero con temple, quietud y buenas formas. No anduvo fino con los aceros y perdió dos ganados apéndices.