Collado Villalba

Se paraliza el desahucio de una familia en la urbanización Entresierras

Arancha Ortega | Miércoles 22 de octubre de 2014
El del pasado miércoles será un día que Rosa y su familia nunca podrán olvidar. Tras meses de angustias y noches en vela, estaba previsto que a las 10 de la mañana se procediera al desahucio de su vivienda, ubicada en la urbanización Entresierras de Collado Villalba.

Cientos de vecinos, junto a miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH - Sierra Oeste), que han estado ayudando y asesorando a la familia, gritaron de alegría cuando la propia Rosa les comunicó que la entidad Ibercaja había accedido a dejar que se quedarán en la casa con un alquiler social durante el próximo año.


La historia de Rosa, como la de muchos desahuciados, es especialmente dura, ya que es el principal sustento de sus padres, de 77 años de edad, que cuentan únicamente con una pensión no contributiva de poco más de 200 euros, pero también de sus dos hijos menores de edad y su hermano enfermo. Ella lleva años en el paro, por lo que cobra el subsidio de desempleo de 426 euros.

Según explica Rosa, su situación ha ido a peor en los últimos años. Cuando se divorció, el juez estimó una pensión para sus hijos y el pago de la hipoteca, si bien asegura que su ex pareja nunca cumplió lo estipulado. Esto, unido a la crisis económica y al desahucio de sus padres de la vivienda donde vivían, ha provocado que se encuentre en una situación de riesgo de exclusión social.

Tras conocer que el banco iba a proceder a su desahucio, Rosa se puso en contacto con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, desde donde le han estado asesorando en los pasos por donde iba a discurrir su vida y la de sus hijos en los próximos meses.

Tras conocerse que Ibercaja accedía a un alquiler social y que más de un centenar de vecinos se había agolpado en su calle para evitar el desahucio, Rosa rompió a llorar y dio las gracias a todos los que la habían apoyado.

También la PAH ha querido agradecer a todos los que se han acercado al inmueble para mostrar su solidaridad e impedir el desahucio de Rosa y su familia. Entre los miembros de la plataforma que acudieron a Collado Villalba se encontraba Rafa Mayoral, uno de los abogados de esta entidad a nivel nacional. “Ha sido un día de lucha -indicaron miembros de la PAH- en el que se ha hecho muy visible la emoción, y han sido muchos los que os habéis acercado para darnos las gracias por el trabajo que llevamos adelante para que las familias puedan permanecer en su vivienda”.

Lucha ejemplar
Para la plataforma, con esta acción se ha demostrado que “la unidad de organizaciones y habitantes de nuestros pueblos puede dar buenos frutos en esta lucha por la vivienda y en muchas otras. Hoy ha sido un día de lucha ejemplar en la Sierra y esperamos tener muchos más como este”, aseguraron.

Tras esta situación, a Rosa le queda mucho por pelear. Aún tiene que solicitar al juez una revisión de las medidas de su acuerdo de divorcio, pero de lo que está segura es que al menos durante los próximos meses podrá dormir en la que ha sido su casa y donde ha visto crecer a sus hijos.