Pendientes de un giro casi imposible

Sólo el vuelco más impensable salvaría al CUC Villalba de bajar a Preferente este domingo. El equipo visita al Colmenar -Alberto Ruiz, 11:30 horas- sin más solución que ganar y esperar la derrota del Atlético de Madrid C, que recibe a un Alcobendas Sport que no sólo no se juega nada, sino que además comparece en el Cerro del Espino sin los sancionados Álex Seidel, Buyo, Mario, Álex Navarro y Migui. A estos condicionantes se suma la reacción del filial colchonero en las últimas jornadas, con 10 puntos obtenidos de los últimos 12, y el estancamiento del CUC Villalba, que suma ocho jornadas sin ganar y que ha interiorizado que afrontar la última jornada pendiente de un gran vuelco y como única amenaza de un filial de equipo grande es casi sinónimo de descenso.

Día torcido ante el Adarve
“El Villalba ha bajado hoy”, admitía un directivo, al terminar el partido con el Adarve (0-0) y escuchar en la radio que el Atlético C hundía todavía más a los amarillos marcando el 0-1 en Aravaca en la última jugada del partido. “ Tenía calculadas todas las posibilidades, porque teníamos esperanzas de que se produjeran triples y hasta cuádruples empates, y en alguno salíamos favorecidos, pero no pudo ser. Tenemos una mínima opción y vamos a intentarla. Vamos a Colmenar con la ilusión de que podemos salvarnos”, dice Miguel Ángel Hernández, que puede ver como su anterior equipo, el Atlético C, da el tiro de gracia a su primer proyecto como primer entrenador.

De consumarse la caída a Preferente, el golpe será duro para un club que ya había movido ficha para confeccionar un equipo fuerte para el año que viene y que no termina de conjugar una buena gestión deportiva con otra buena a nivel económico. Tras el cataclismo en las cuentas de la temporada pasada, en la que paradójicamente llegó el mayor éxito deportivo del club con el subcampeonato de liga, gracias a la implicación de los futbolistas, el descenso puede venir justo cuando el presidente aproxima la quita de deuda a los 100.000 euros y cuando los socios están llamados a votar el 15 de mayo una fusión con la AD Collado Villalba de fútbol sala que, de aprobarse, generará la mayor entidad deportiva de la Sierra en número de deportistas y por visibilidad nacional en las últimas dos décadas.

Cómo afecta el futuro del Atlético B
Si se diera la única carambola favorable en la última jornada, el CUC Villalba accedería a la 16ª plaza -séptimo por abajo-, que hasta ahora era considerada peligrosa por el riesgo de los descensos de categorías superiores. Si el Villalba la alcanzase superando al Atlético C, sellaría su permanencia, dado que el descenso del Real Madrid C a Tercera, ante una hipotética caída desde Segunda División del Castilla, sería absorbido por el Grupo VII confeccionando otra liga supernumeraria de 22 equipos, contando con el descenso ya consumado del Puerta Bonita. Fuera de eso, y teniendo en cuenta que el Getafe B logró el pasado domingo su salvación matemática en Segunda B al ganar al Huesca (con gol del villalbino Ivi López), sólo el descenso adicional del Atlético de Madrid B ofrece dudas sobre sus consecuencias. A día de hoy, el filial colchonero está matemáticamente metido en promoción de descenso a Tercera. Su posible caída, combinada con la del Castilla, no tendría consecuencias si el Villalba supera al Atlético C y éste baja por razones clasificatorias, haciendo hueco a su hermano mayor.

Sin embargo, existen ciertas dudas de reglamentación que sólo serán despejadas cuando acaben todas las competiciones y se confirmen los grupos resultantes, que cada final de temporada se someten a debate y aprobación en la Asamblea General de la Federación de Madrid.