El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
El Equipo de Gobierno de Collado Villalba llevará al pleno del próximo jueves una serie de modificaciones en las ordenanzas fiscales que se traducirán principalmente en una rebaja del 5 por ciento en el IBI -que tras la revisión catastral aprobada por Hacienda antes del estallido de la burbuja inmobiliaria había experimentado sucesivas subidas- y del 30 en la tasa de basuras. En el primer caso, es necesario domiciliar el recibo, ya que esta es la única vía que tiene el Ayuntamiento para aplicar la citada bonificación, ya que el Plan de Saneamiento impide tocar a la baja el tipo impositivo. Por otra parte, habrá quien se pregunte: ¿Por qué ahora y no antes? La respuesta es bien sencilla: hasta este momento, la situación de las arcas municipales, con una deuda heredada de 120 millones de euros, hacía imposible plantearse cualquier tipo de rebaja fiscal. Una vez que la hemorragia ha sido atajada -con medidas en muchos casos impopulares, renunciando a las grandes inversiones que eran práctica habitual durante legislaturas pasadas (aunque luego las facturas se dejasen sin pagar) y elaborando unos presupuestos austeros y más realistas-, los villalbinos podrán encontrar en estas medidas un pequeño respiro después de unos meses de continuos sacrificios.