Cartas al Director

• Los ciclistas y sus obligaciones

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Aun sabiendo que esta carta levantará muchas ampollas entre aquellas personas que gustan de utilizar la bicicleta por la ciudad, no tengo más remedio que hacerla pública porque siempre he creído que las bicicletas deben circular por las calles y, una vez acondicionado y ampliado el carril bici en nuestra ciudad, por éste, pero jamás subir a las aceras e ir esquivando a las personas que transitamos por las mismas. Llevamos algunos años en los que ciertos ciclistas parecen haber olvidado esta premisa para circular (supongo para ahorrar tiempo y esfuerzo), haciéndolo por donde les viene mejor, incluida la zona dedicada exclusivamente a los peatones, que no es otra que las aceras. También, otros, cuando circulan por la vía pública, no suelen respetar el ir por el lado derecho de las calles, ni aproximarse a los bordillos. Prefieren ir a su aire. Y dentro de ir a su aire, también he observado que gustan de hacerlo en zigzag, entre coches (en esto los de las motocicletas son unos verdaderos especialista). Y no todos respetan los semáforos, si están en rojo les da igual, aprovechan unos segundos y pasan entre los peatones que se en esos momentos están superando el paso de cebra. ¿Y qué me dicen de aquellos, cada vez más, que ni siquiera respetan las direcciones prohibidas?.

Con esta forma de circular, en ocasiones los infractores han originado muchos accidentes. Sé que los conductores también cometen bastantes errores, pero hay una diferencia grande entre automovilistas y ciclistas, sobre todo a la hora de responder de sus actos. Si a un conductor le sorprende la Policía Local conduciendo su vehículo de una forma irregular y temeraria, le sancionan; pero si el infractor es un ciclista que circula a su libre albedrío, como mucho le puede caer una reprimenda, pero no más. Y eso a mí me parece bastante injusto.

MARTA ARROYO
Collado Villalba