El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
“Los finales de año suelen ser propicios para reflexionar, echar la vista atrás y hacer balance sobre nuestras actuaciones presentes y futuras. Supongo que esto que acabo de decir, estando ya a menos de 20 días para dar carpetazo a 2013, a algunos miembros de la ‘clase política’ local les puede poner un ‘pelín’ nerviosos pues, a estas alturas de legislatura (la nueva cita con las urnas está a tan solo 18 meses), deberán olvidar los discursos populistas y coger el ‘toro por los cuernos’ si quieren demostrar, tal como lo está haciendo el Ejecutivo de Agustín Juárez, su capacidad de gestión para poder sacar adelante a una ciudad que estuvo hundida en la miseria económica gracias a la nefasta gestión de los gobiernos socialistas (1999-2011) y, sobre todo, de un ex alcalde despilfarrador, de cuyo nombre prefiero hoy no acordarme (creo que los villalbinos tampoco), obsesionado en secundar aquella vieja teoría de Groucho Marx: “La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados”. Y así nos luce ahora el pelo. La política, dice Lobo Cojo está más que inventada, digan lo que digan algunos ‘iluminados’. La gente es más sencilla de lo que muchos creen y lo que pide a sus futuros dirigentes políticos es que defiendan el interés general de todos, que sean austeros y honrados en el manejo de los dineros públicos. Y, sobre todo, humildes, cercanos y sinceros. A partir de ahí, los inventos con ‘Casera’, porque de ‘salvadores de la patria’ está el cementerio político lleno y las tesorerías de muchos ayuntamientos al borde de la quiebra”.