San Lorenzo

El PSOE de San Lorenzo, a favor de exhumar los restos de Franco y Primo de Rivera

ENRIQUE PEÑAS | Miércoles 22 de octubre de 2014
Después de que el PSOE presentara la semana pasada en el Congreso de los Diputados una iniciativa en la que pedía exhumar los restos mortales de Franco para sacarlos del Valle de los Caídos y enterrarlos en otro lugar donde decidiera la familia, los socialistas de San Lorenzo de El Escorial han mostrado su “apoyo total” a esta propuesta. “Hay que coger el toro por los cuernos y adoptar una solución”, señalaba el portavoz del PSOE local, Francisco de Gregorio, si bien reconocía que también hace falta “un proyecto integral” que aborde su futuro más allá de “sacar los restos de Franco y Primo de Rivera”. “Tiene que ser un monumento dedicado a la memoria y la reconciliación”, indicaba, apostando por dar “un paso adelante”.


Pragmatismo
Desde un punto de vista “pragmático”, añadía, el Valle de los Caídos “es un monumento que se debe explotar mejor turísticamente”, aseguraba, aunque cabe recordar que fue precisamente el anterior Gobierno del PSOE el que decidió mantenerlo cerrado al público durante meses y que el grupo municipal rechazó en 2011 apoyar una moción en la que se pedía la reapertura al público del monumento, propuesta que sí contó con los votos a favor del Partido Popular y AME.
“No se trata sólo de sacar sus restos, ni tampoco de dejarlo como está, sino que hay que tener valentía política y presentar un plan viable”, manifestaba de Gregorio, para quien el Valle de los Caídos “puede ser un motor para atraer un mayor número de turistas, pero para eso es necesario crear una oferta completa, por ejemplo con una entrada conjunta al Monasterio y al Valle”. Igualmente, añadía que “es difícil explicar a un turista extranjero que va a ver un monumento fascista”, abogando por su redefinición como un espacio “dedicado a la memoria histórica y la reconciliación”.

Según la proposición no de ley, impulsada por el ex alcalde de San Sebastián Odón Elorza, “ha llegado el momento, por dignidad democrática, de que “el Valle de los Caídos, un antiguo símbolo de la represión del nacional-catolicismo, se convierta en un espacio de dignificación, honor y homenaje a todas las víctimas de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura, represente un lugar abierto a la convivencia democrática de toda la ciudadanía y un espacio de reconciliación y concordia”.

Como primera medida, el PSOE plantea, a unos días del 20-N, la exhumación de los restos de Francisco Franco y del fundador de Falange,José Antonio Primo de Rivera.

Deriva lamentable
Ante esta propuesta, el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González (PP), señaló hace unos días que ya no le “sorprende nada” del PSOE, afirmando que “está en una deriva lamentable” y que “tiene una falta de rigor y criterio” sobre cuáles son los problemas “que en estos momentos afectan a los ciudadanos españoles”.

Por su parte, la Asociación Para la Defensa del Valle de los Caídos (ADVC) recordó que este monumento ya se planteó desde su concepción como “símbolo de reconciliación”, añadiendo que los sepulcros de Franco y Primo de Rivera se encuentran en la Basílica Pontificia y, por tanto, el Estado carece de competencia alguna en su interior.

Símbolo de reconciliación
“El Valle de los Caídos es, le pese a quien le pese, un lugar concebido como símbolo de reconciliación, donde se reza a diario por todos los caídos de ambos bandos de la Guerra Civil española y la ADVC no va a permitir que se despoje al Valle de este carácter por parte de quien, visto lo visto, nunca se ha querido reconciliar”, indicó este colectivo en un comunicado, recordando además que la “única persona” que puede decidir sobre los restos mortales de Francisco Franco es su hija, que en reiteradas ocasiones ha mostrado su “absoluta disconformidad” con el citado planteamiento.

Por último, la Asociación aseguró que la Comisión de Expertos carece de “objetividad” por ser de “designación unipartidista” y acusó al PSOE de “faltar gravemente a la verdad” cuando dice que el anterior régimen tomó en noviembre de 1975 la decisión de inhumar a Franco en un sepulcro cerca del altar mayor de la Basílica cuando fue una decisión del actual jefe del Estado.