El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La noticia relacionada con la sentencia firme dictada hace apenas unos días por el Juzgado número 30 de lo Contencioso-Administrativo de Madrid, atendiendo la denuncia presentada por el grupo DHO Obras y Construcciones S.A, respecto a dos facturas pendientes de pago por parte del Ayuntamiento de Collado Villalba, ambas relacionadas con la construcción del denominado centro acuático de la Ciudad Deportiva y cuyo importe ascendía a 2 millones de euros, de los cuales, 267.452 corresponden a intereses de demora, provocó el embargo judicial de las cuentas bancarias de este Consistorio y se ha convertido durante los últimos días en noticia de actualidad no sólo para los medios locales y regionales, sino también para otros de ámbito nacional, caso de ‘ABC’ y ‘El País’.
También ‘Telemadrid’ incluyó este asunto en sus informativos de fin de semana, un despliegue bastante lógico ya que no todos los días los tribunales de Justicia emiten ordenes de embargo contra las cuentas bancarias de los ayuntamientos madrileños.
Afortunadamente y gracias a la gestión realizada por el Gobierno local que preside Agustín Juárez López de Coca, dicho embargo ha sido levantado esta misma semana a cambio de que este Consistorio entregue a DHO, Obras y Construcciones. S.A. un terreno municipal cuyo valor en el mercado compense dicha cantidad. Para dar cumplimento a este pacto los responsables del Ejecutivo villalbino se han comprometido a entregar a dicha constructora un terreno municipal que compense los 1.7 millones de principal, más 267.000 euros de intereses, reclamados judicialmente, debiendo presentar al respecto un listado sobre su patrimonio disponible para que DHO decida la parcela que más le interesa.
Una medida que va a disminuir aún más el poco patrimonio que aún le queda al municipio villalbino, pero que era la única salida que quedaba para poder romper el bloqueo económico de una Administración local acosada por las deudas, lo que incluso podría haber puesto en peligro el pago de las nóminas a final de mes de los funcionarios y trabajadores municipales.
Como recordarán nuestros lectores este Consistorio, tal como recogía el diario ‘El País’ el pasado lunes, “ya tiene incautada, por sentencia judicial, otra finca [Caño de la Fragua, situada junto a la ITV] para responder del canon anual comprometido con la empresa concesionaria del túnel y aparcamiento construido en el centro del municipio. El contrato comprometía al municipio a abonar una tasa anual de 1,5 millones hasta el año 2046. El embargo responde al primer pago del año 2009 [cuando el socialista José Pablo González presidía la corporación municipal], aunque el Ayuntamiento no ha pagado el importe ningún año”.
De aquellos polvos...
El despilfarro del dinero público fue denominador común en la gestión del Gobierno socialista durante los últimos ocho años. Salvando la primera legislatura (1999-2003), en la que el PSOE gobernó en coalición con Izquierda Unida, en los años siguientes el Ejecutivo que con mano de hierro presidía José Pablo González empezó a perder el pudor para entrar en una deriva derrochadora cuyas consecuencias ahora están condenados a pagar varias generaciones de villalbinos.
De todos los proyectos faraónicos que llegaron a plantearse los responsables socialistas (cubrir la A-6 a su paso por esta ciudad, una plaza de toros cubierta, un gran auditorio, un polideportivo cubierto y un largo etcétera), sólo se acometió el más caro de ellos y a la vez el menos deseado por los vecinos: es decir, el túnel-parking de Honorio Lozano-Batalla de Bailén, una obra que se intentó justificar en la necesidad de contar con un amplio aparcamiento para vehículos (ya se estaba construyendo el de la biblioteca municipal Miguel Hernández, con casi 300 plazas) y la mejora de accesos y circulación en la zona comercial de Collado Villalba-Estación.
Una pesadilla
“Lo que en principio parecía una buena idea -escribía Esther Sánchez este lunes en ‘El País’, un túnel de 343 metros con un aparcamiento para 771 vehículos en el centro urbano, se ha convertido en la peor pesadilla de Collado Villalba (65.000 habitantes). El desembolso total por la infraestructura -20 millones de euros, que crecieron hasta 40, más el canon anual a pagar a la empresa adjudicataria de la obra hasta 2046- se dispara a la inabarcable cifra de 111 millones, según un informe del secretario municipal”.
Y hemos decidido transcribir estas líneas porque, como muchos de nuestros lectores saben, todos los desmadres que ahora desvelan distintos medios sobre dicha obra fueron denunciados mes a mes y durante más de dos años por El Faro del Guadarrama con todo detalle, pese a la persecución a la que se vio sometido este medio por parte del Ejecutivo socialista. Es más, el por entonces editor, Manuel J, Ortega, fue denunciado judicialmente por el propietario de la empresa Cover, José Carlos Gómez, constructora que en UTE con Ortiz fue la adjudicataria de dicha obra, por presuntas calumnias e injurias que según el querellante habían sido vertidas en estas páginas y relacionados con una infraestructura cara, compleja en su desarrollo e innecesaria que, como advertíamos, terminaría vaciando las arcas del municipio.
Síntomas de abandono
Lamentablemente, así ha sucedido. El parking está vacío a diario; es más, la segunda planta del mismo lleva tiempo cerrada al público. El resto de las instalaciones empiezan a dar síntomas de abandono (aseos cerrados, falta de vigilancia, suciedad, poca luz...) y el túnel, aquel que iba a solucionar los problemas de circulación en la almendra comercial de Collado Villalba, apenas es utilizado por los vehículos y muestra los mismos síntomas de abandono.
39 cuotas anuales
Y lo peor de todo esto es que hasta el año 2046 el Ayuntamiento, si nadie lo remedia, va a tener que seguir pagando un canon multimillonario que asciende a 111.472.784, 72 euros, a través de 39 cuotas anuales cuyos importantes oscilan entre 1.256.333,72 correspondiente al año 2008 y los 5.399.943,42 euros que deberá satisfacer el Ayuntamiento a la empresa concesionaria en 2045.
Y todo esto lo tiene que pagar, de una u otra manera, un Ayuntamiento que cuenta con un presupuesto anual de menos de 50 millones de euros para atender las necesidades de más de 60.000 ciudadanos, que tiene una plantilla de medio millar de trabajadores y que se ha visto obligado a adquirir unos compromisos de pago a proveedores que rondan el 30 por ciento de su presupuesto. “Milagros-como nos confesaba un miembro del Gobierno local-, sólo en Fátima”.