INTERINO
El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
“Me encontraba el pasado viernes en mi rotonda ultimando los preparativos para la celebración de Fin de Año, cuando un confidente que reside en la urbanización Los Valles se acercó hasta aquí para decirme que varios miembros de la Brigada de Obras del Ayuntamiento habían cortado el túnel subterráneo de la A-6, dice Lobo Cojo. En principio no le creí porque lo que me contaba no podía tener ni pies ni cabeza, pero dada su insistencia opté por desplazarme hasta la zona y al ver el colapso circulatorio que había entendí que este vecino se pasara al volante de su utilitario una hora para cubrir el trayecto que separa su urbanización de Batalla de Bailén. Pues bien, los autores de ese caos eran dos pintores que, bien por iniciativa propia, bien cumpliendo las órdenes que les había dado el iluminado de turno, cerraron dicho túnel al tráfico rodado para pintar un paso de cebra. Casi dos horas tardaron en realizar su faena (nunca mejor dicho), y una vez finalizado su trabajo se marcharon tan campantes, mientras cientos de sufridos conductores quedaban atrapados en un impresionante atasco que afectaba a la zona de La Masía, calle Juan Carlos I, puente del Zoco y carretera de la Granja. Los mandaos, o su incompetente jefe, no pudieron elegir mejor día, ni mejor zona, para hacer este trabajito: un 29 de diciembre, a las doce de la mañana, día de mercadillo, zona de Los Valles y con las calles de Villalba a tope de vehículos y de personas dispuestas a hacer las últimas compras del año. ¡Ah! y damos fe de la veracidad de este relato”.