FÚTBOL / Tercera División Grupo VII – 3ª Jornada
JAIME FRESNO | Miércoles 22 de octubre de 2014
El CUC Villalba fulminó el efecto remontada en contra, padecido ante Alcorcón B y Atlético C, castigando al Rayo Majadahonda con tres goles en una hora. El ejercicio de pegada y buen juego le sirvió para tumbar en su propia casa a uno de los claros candidatos al play-off, un Majadahonda al que no le sirvió el arreón final que estrechó el marcador definitivo hasta el 2-3 definitivo.
Miguel Ángel Hernández dispuso cuatro cambios en la alineación respecto al domingo anterior: Bárcena ocupó la portería en lugar de Edu Padilla, y Raúl, Eliot y Herranz entraron como novedades en zonas de creación. El equipo tardó en ensamblarse y sufrió las acometidas iniciales de un ofensivo Rayo Majadahonda, lanzado desde el medio campo por los ex villalbinos Julio Cidoncha y Olmedo. Sin embargo, el gol de un hiperactivo Coke a los 13 minutos sembró dudas en los locales y pasó el control a los serranos, muy cómodos para hacer su juego con el 0-1. En esa nueva fase, Fabio realizó una gran jugada para servir el doblete a Coke y sacarse la espina de aquel tiro palo con todo a favor del año pasado, un lance que pudo cambiar su suerte en el equipo. El hoy lateral villalbino se reivindicó en el mismo escenario con una asistencia que acabó por romper el partido y el mensaje de que el equipo tiene un especialista en la izquierda tanto abajo como arriba, algo que confirma la apuesta de su entrenador.
Con 0-2, el CUC Villalba explotó la posesión de balón y a través de ella mantuvo a raya los intentos majariegos de acortar distancias, aunque Bárcena tuvo que emplearse a fondo cerca del descanso para sacarle a Gorka un remate de gol.
A vuelta de vestuarios, y cuando se esperaba un asedio total de los locales, llegó la jugada del partido, cuando Manu, uno de los últimos héroes del Majadahonda de play-off, trazó una diagonal partiendo de banda y ajustó un pecioso remate que batió a De las Heras tras tocar el palo. El 0-3 trajo minutos de zozobra para el Majadahonda, expuesto a los contragolpes. En uno de ellos, Marcos Gil pudo subir al marcador el 0-4, pero fue el cuadro de Iriondo quien vio puerta con un penalti cometido por Eliot y transformado por Sánchez, todavía con 20 minutos por delante. El 1-3 metió a los locales en el partido y echó atrás al Villalba, que vio como un nuevo gol de Juancar estrechaba el resultado y le abocaba a un final incierto. El Majadahonda apretó con todo y tuvo acercamientos para el empate, pero el Villalba resistió un angustioso descuento de cinco minutos para llevarse la primera victoria de la temporada. Un triunfo de ley en el feudo de un gran equipo que todavía debe despertar.