El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Como en años anteriores, una de las citas políticas más relevantes del verano está en la Sierra, aunque en esta ocasión cambiando la sede de Navacerrada por la del complejo Fray Luis de León, en Guadarrama. Allí se inauguró el lunes la décima edición del campus de la Fundación FAES, en un acto presidido por José María Aznar y por la secretaria general del Partido Popular y presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal.
Cercenar la corrupción
Tras una breve presentación por parte de Aznar, que este año no pronunció su habitual discurso de apertura, la número 2 del PP defendió la necesidad de dotar a la sociedad de mecanismos “capaces de cercenar la corrupción”, reivindicando además “el deber de ejemplaridad” de los políticos.
“Aquéllos que tanto alardean de es que el tiempo de la antipolítica no se dan cuenta de que la mejor protección contra el populismo, la demagogia y la anarquía es precisamente la política con mayúsculas, y cuando no se cree en la política, a veces la tiranía empieza a pasear”, manifestó Cospedal, añadiendo luego que “sólo aplacaremos los reproches si recuperamos la vida pública y sus valores y, sin caer en equívocos, ofrecemos soluciones nuevas y comprometidas”.
Cambios en todo
Por último, la que fuera consejera en uno de los gobiernos de Esperanza Aguirre defendió la gestión de Mariano Rajoy, del que dijo que está consiguiendo sacar adelante las “pretensiones íntimas” de una sociedad española que pedía cambios “a gritos”. “Cambios en todo: en nuestra percepción de la vida, en los valores que imperan y en la forma de ejercer el Gobierno y llevar adelante un auténtico proyecto reformista que nos permita llegar a la sociedad española y europea ofreciendo soluciones nuevas a un momento nuevo”, manifestó.
Ya dentro de la actividad del campus FAES, el ex presidente del Gobierno, José María Aznar, reiteró el martes su apuesta por realizar una reforma fiscal para bajar los impuestos, proponiendo que se tome como referencia las realizadas cuando él gobernaba, en los años 1999 y 2003.
En este sentido, defendió “una reforma fiscal amplia, profunda, que cambie muchos de los parámetros existentes y que sea útil para el crecimiento, la prosperidad, la creación de empleo y la solidaridad”. “Cada vez son menos las voces que se oponen a que se debata una reforma fiscal o que niegan su necesidad”, subrayó Aznar.
El campus será clausurado el domingo por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Las recetas de la Fundación
La Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) presentó su propuesta sobre la reforma fiscal, en la que contempla un IRPF con tres tramos, la reducción de los tipos marginales y rebajar el máximo al 40 por ciento desde el 52 actual, así como la “racionalización”, de las deducciones que actualmente existen en este impuesto y la recuperación de los mínimos personales y familiares que se aprobaron en 1998. La propuesta de FAES en el IRPF pasa además por mantener un gravamen del ahorro distinto al de las rentas del trabajo, con un tipo único que podría situarse en el 25 por ciento. Igualmente, plantea la eliminación del Impuesto de Patrimonio.
En el Impuesto sobre Sociedades, el laboratorio de ideas del PP apuesta por reducir el tipo nominal del tributo (del 30 a un 20-25 por ciento), así como por eliminar el tratamiento fiscal más favorable para las pymes. FAES plantea también revisar “con prudencia” el catálogo de bienes y servicios que actualmente tienen un IVA reducido. Finalmente, en este informe se indica que hay “margen de subida” en el impuesto que grava el consumo de carburantes y el de alcohol, y pide no exceptuar del incremento de este último al vino y a la cerveza.