El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
En pleno debate sobre la necesidad o no de bajar impuestos con el fin de contribuir al crecimiento económico y a mejorar la situación de las familias, el alcalde de Galapagar, Daniel Pérez Muñoz (PP) ha anunciado esta semana que el esfuerzo que los ciudadanos han realizado a lo largo de los últimos años está dando sus frutos a nivel local, adelantando que en 2014 bajarán algunos de los impuestos, de modo que se reducirá la presión fiscal. “Si Galapagar está ahora en esta óptima situación es gracias a los galapagueños. Todos nos hemos apretado el cinturón y ahora llegan los resultados porque el municipio ha salido de la crisis, tiene un superávit de 1,2 millones de euros y ya podemos hablar de crecimiento, inversión y empleo”, destacó el regidor.
De este modo, los presupuestos para el próximo ejercicio contemplarán así las nuevas medidas fiscales con la bajada de impuestos como el IAE, la tasa de basuras y las licencias de actividad y urbanísticas. En 2015, añadieron desde el Equipo de Gobierno, será el turno para el Impuesto de Vehículos (IVTM).
Todo ello, recordó el Ejecutivo, al tiempo que se reactiva la inversión a nivel municipal, con el macroproyecto del Mercado Municipal y el Centro de Salud como actuación estrella. Cabe recordar que esta operación supondrá la construcción de un nuevo Ayuntamiento y una superficie comercial, además de la remodelación y reordenación de distintos espacios del casco urbano, como el Centro de Mayores, la actual Casa Consistorial, la Casa de Cultura o el Centro Cívico Reina Sofía. Igualmente, se mejorará el parque del Toril. En total, subrayaron desde el Equipo de Gobierno, “una inyección económica de 4 millones de euros” que permitirá crear más de 100 empleos directos.
Austeridad y control del gasto
Las claves para remontar la precaria situación de las arcas municipales, que en 2008 se encontraban al borde de la quiebra, tal como llegó a afirmar la entonces alcaldesa, Carmen Toledano (PSOE), son “austeridad y control del gasto”, afirman desde el Ejecutivo que encabeza Daniel Pérez. Entre las medidas implementadas a lo largo de los últimos cinco años, recordaron, destaca la reducción de las retribuciones de los políticos en un 24 por ciento (más de 200.000 euros anuales), el recorte de 4 millones de euros en gastos de personal, la eliminación de las dietas y gastos de protocolo, la supresión de las subvenciones a los grupos políticos (210.000 euros de ahorro hasta la fecha), la existencia de un único cargo de confianza con dedicación exclusiva o la eliminación de alquileres de edificios públicos que suponían un importante gasto para el Ayuntamiento.
“Un gran abanico de medidas que han servido para devolver la confianza a vecinos y empresarios, que saben que en esta localidad se gobierna con honradez y sentido común”, concluye el Ejecutivo galapagueño.