Los aullidos de Lobo Cojo

“Con el verano a la vuelta de la esquina y los programas de las fiestas locales a punto de cerrarse, hay cierta preocupación entre los aficionados taurinos locales por saber hasta qué punto la crisis económica por la que atraviesan las arcas municipales va a incidir en los carteles de San Antonio y Santiago. No hay que ser un lince, dice Lobo Cojo, para advertir que no se va a repetir el despilfarro de antaño, cuando el gobierno del generoso JP adjudicaba por decreto a su empresario ‘amigo’, Tomás Entero, las ferias de nuestra ciudad que, por no ir más lejos, en 2010 costaron a los villalbinos 400.000 euros -258.000 (Santiago) y 135.000 (San Antonio)-, es decir, casi 70 millones de las antiguas pesetas que fueron destinados a sufragar un par de corridas de toros, varias novilladas y los beneficios de este empresario que, por cierto, el año pasado en Alpedrete, y por el ‘módico’ precio de 90.000 euros, promovió una corrida de toros y dos novilladas. Sin embargo, aquí la alcaldesa ha cortado por lo sano, convencida de que con ese dinero podía atender otras necesidades más importantes para sus vecinos. Entero, tras conocer su ‘cese’, dijo: “... esta es una mala noticia para Alpedrete y el Ayuntamiento debe valorar lo que pierde si no hay toros”. Marisol, de momento, ya se ha ahorrado 15 millones de pesetas, y eso con la que está cayendo en las haciendas locales es mucha pasta. En Villalba, el Ejecutivo de Juárez, tras ganar las elecciones, también prescindió de los servicios de este empresario, rebajando así el presupuesto a la mitad. Y este año, supongo, ocurrirá lo mismo; es decir, habrá toros, encierros y novilladas, pero más baratos. Sé lo delicado que es escribir de toros, pero como hace tiempo decidí refugiar mi razón en la lista de agravios, ahí queda”.