El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
LIMÓN al alcalde del Ayuntamiento de Majadahonda, Narciso de Foxá, que pese a gobernar uno de los municipios más seguros de la Comunidad de Madrid cree necesario contar con un equipo completo de escoltas que, al menos durante en 2012, le costaron a sus vecinos 256.000 euros. La protección policial de la primera autoridad majariega consta de cuatro funcionarios, un cabo y tres agentes que, además de su salario, también cobran diferentes complementos. El desmadre es tal que el chófer-guardaespaldas del alcalde obtuvo este año una subida salarial de 8.89126 euros, sin haber sido modificadas sus funciones, pasando sus emolumentos de 33.021,38 euros a 41.920. Y mientras, miles de familias españolas en la miseria.