Opinión

Jueces y periodistas

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
El último barómetro del CIS muestra que la Corrupción se ha convertido ya en el segundo gran problema para los españoles, sólo por detrás del Paro. En la misma encuesta se señala que los jueces y periodistas son los profesionales peor valorados por los ciudadanos. Resulta, en cierta medida, sorprendente y contradictorio que aquellos que han destapado los escándalos en los medios y los que los investigan en los juzgados estén tan mal vistos por quienes consideran la corrupción una enorme preocupación. Sin la labor de ambos colectivos no se habría sabido absolutamente nada de las preocupantes tropelías de Bárcenas y Urdangarín, ni siquiera de los EREs andaluces.


Los jueces Ruz y Castro están actuando con seriedad, integridad y rigor, y representan la esperanza de que el sistema democrático puede ser capaz de depurar responsabilidades. Ni el yerno del Rey ni Bárcenas, ni el PP ni el PSOE escapan a la acción de la Justicia. Con todos los reparos, peros y cautelas que se pongan con toda la razón a esta afirmación. Aún queda mucho para saber si los corruptos realmente pagarán, pero se está en el buen camino. La prensa atraviesa una crisis gravísima, económica y de modelo, sin duda tiene muchas limitaciones y defectos, pero sigue siendo un pilar imprescindible en la democracia. No digamos los jueces. Los periodistas debemos reflexionar muy seriamente sobre por qué estamos tan mal valorados. Algo estaremos haciendo mal. Pero, a la vez, los ciudadanos tienen que ser conscientes que sin la labor de jueces y periodistas la sociedad estaría en la inopia y los corruptos camparían libremente. Eso sí, la corrupción no sería un gran problema.