JAIME FRESNO | Miércoles 22 de octubre de 2014
“Esta vez me he metido en un follón muy grande”, dice Francisco Javier Vacas, ciclista de ultrafondo de Villaverde de 43 años, el hombre que buscará mañana en el Velódromo de Galapagar el récord mundial de los 1.000 kilómetros bajo techo. Para lograrlo, Vacas tendría que marcar menos de 27 horas 31 minutos, registro en poder del esloveno Marko Baloh, marcado el pasado año en Italia. “Está muy jodido ya que lo tiene un ciclista que ha sido profesional y que hoy por hoy es el mejor ultraciclista para mí”, reconoce Vacas, un hombre que, no obstante, acude a la cita con el aval de ser el recordman de los 1.000 al aire libre, entre otras hazañas. El de Villaverde ha elegido para el reto Galapagar “porque es la mejor instalación de Madrid, aunque es algo dura”. Echará a rodar mañana a las 9 de la mañana y se espera que termine sobre el mediodía del domingo. “Para bajar el récord tendré que rodar a 37,6 km/h de media; vamos, que hay que ir a 38 por lo menos para poder hacer tres o cuatro paraditas de 5 minutos para soltar piernas, espalda y cuello”, explica.
El intento ha despertado una gran expectación en Galapagar.