El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La denuncia que esta semana ha hecho el PSOE de Alpedrete acerca de la lamentable imagen que ofrecen no pocas calles y zonas verdes de la localidad certifica una vez más la decadencia del Gobierno que encabeza Marisol Casado. Árboles que invaden las aceras, farolas en estado de absoluta precariedad o escombreras incontroladas forman parte del paisaje urbano, tal como han señalado los socialistas. No se trata de llevar a cabo grandes inversiones, ni tampoco de poner en marcha infraestructuras de utilidad más que dudosa, sino de atender el día a día de los vecinos, tarea en la que el Ejecutivo naufraga de manera reiterada desde hace tiempo, demostrando una preocupante dejadez. Ocurrió ya con las denuncias de algunos alpedreteños durante las pasadas fiestas patronales -de las que nos hicimos eco en estas mismas páginas de El Faro del Guadarrama- y también con el silencioso cierre de la Oficina Judicial, poniendo en evidencia a un Equipo de Gobierno que parece en manifiesta caída libre, alejado completamente de los problemas de los ciudadanos.
Parece claro, en definitiva, que el ciclo de Marisol Casado ha terminado, con una gestión que en los últimos años ha sido hueca, sin más empeño que sacar adelante el Plan General de Ordenación Urbana, pero descuidando de forma preocupante el bienestar diario y cercano de los vecinos.