JAIME FRESNO | Miércoles 22 de octubre de 2014
Carlos Soria decidió poner punto y final a su expedición al Dhaulagiri, la séptima montaña más alta de la Tierra (8.167 metros). Las malas condiciones meteorológicas, la carga de nieve en la ruta a la cumbre, más la pérdida de material imprescindible para intentar subir a ella, son las razones que han hecho renunciar al montañero de Moralzarzal, después de 38 días de expedición. Así lo explicó en su último comunicado, emitido este martes desde el campo base, a 4.700 metros de altitud: “...las circunstancias y la montaña mandan. Hace muy mal tiempo, las previsiones meteorológicas indican que va a seguir así, y para colmo, junto a las dos tiendas que teníamos en el campo 3, una avalancha o el viento se han llevado una tienda que teníamos en el campo 2 con más material, incluyendo los monos de pluma, imprescindibles para cualquier intento de cumbre. Si a eso sumamos que la cuerda fija que estaba ya puesta ha quedado inutilizada por la nieve y que no tenemos suficiente para sustituirla, realmente debo reconocer que iniciar el regreso a casa es la opción más lógica, si no la única que podemos tomar”. Carlos Soria y su compañero Sito Carcavilla, más los cuatro sherpas de la expedición, llegaron a alcanzar los 7.600 metros la pasada semana, cuando subieron al campo 3 tras una extenuante marcha entre gran cantidad de nieve. Ese desgaste, más el fuerte viento, con rachas cercanas a los 100 km/h, y el riesgo de avalanchas les obligaron a marcarse 24 horas de espera en esa cota, y después a abortar el primer intento de cumbre. La expedición esperó todo el fin de semana en el campo base una mejoría de las condiciones meteorológicas que nunca llegó a estar clara en los partes. Finalmente, cuando los sherpas comprobaron el mal estado de la ruta al campo 2 y constataron la pérdida de material, Carlos Soria y Sito Carcavilla acordaron poner fin a la aventura. Es la segunda vez en un año que el Dhaulagiri rechaza al de Moralzarzal, y la quinta repasando la totalidad de su carrera de montañista. “El Dhaulagiri es una montaña a la que tengo un cariño especial, porque son ya cinco veces las que he intentado escalarla. Pero esta vez he aprendido, definitivamente, que hay que venir a subirla en primavera. En otoño, como ha sucedido ahora, es una misión casi imposible”.
Carlos Soria, que regresará en los próximos días a España vía Katmandú, hace un primer balance positivo de la aventura: “Estoy muy orgulloso de lo que hemos conseguido. Llegar tan alto en esta montaña tan complicada y peligrosa en otoño es para estar contento. Hemos hecho lo que había que hacer, y renunciar era lo más prudente”.
Carlos Soria, que en febrero cumplirá 74 años, podría regresar al Dhaulagiri en la próxima primavera, o en 2014. El Annapurna y el Kanchenjunga son los otros dos picos que le quedan para completar el proyecto de los 14 ochomiles, y pasar a la historia como el montañista de más edad en conseguirlo.