Opinión

LIMÓN

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
LIMÓN a la violencia mostrada por algunos jóvenes que después de pasar horas y horas de juerga gustan terminar ‘sus fiestas’ de forma violenta, golpeando a todo cuanto encuentran a su paso. Unas veces apagan sus iras con el mobiliario urbano y otras, como sucedió la semana pasada en El Escorial, a puñetazo limpio, que en esta ocasión se cobró la vida del joven Alejandro T. J. que, presuntamente, fue golpeado por Adrián B. con una silla, perdiendo el equilibro y golpeándose la cabeza con el suelo. Al margen de la gravedad de los hechos llama la atención que los testigos de la pelea se dieran a la fuga. El presunto acusado de esta muerte se entregó posteriormente en el cuartel de la Guardia Civil y se encuentra en libertad bajo fianza.