Editorial

Una Ordenanza de Convivencia para mejorar la calidad de vida

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
El curso político se inicia en Collado Villalba con el anuncio, por parte del alcalde, Agustín Juárez (PP), de que ya está en vigor la nueva Ordenanza de Convivencia. No sólo eso: añadió el regidor que el Ayuntamiento será “riguroso” e “implacable” en su aplicación. Al margen del ahorro que puede suponer para las arcas municipales (desde el Ejecutivo estiman en más de 1 millón de euros el gasto provocado por actos vandálicos de todo tipo), la normativa ha de servir para evitar situaciones como botellones improvisados en portales y parques, pintadas en fachadas, ataques al mobiliario urbano y un largo etcétera. Es cierto que los protagonistas de estos actos son una minoría, pero no lo es menos que perjudican a todos y que por ello es necesario actuar con firmeza. La ordenanza, bien aplicada, ha de servir además para mejorar la imagen de una ciudad en donde sus calles y espacios públicos ofrecen un aspecto manifiestamente mejorable más a menudo de lo que sería deseable. En este sentido, también es importante instar a las empresas adjudicatarias de los servicios de limpieza y jardinería a que cumplan estrictamente su cometido. Y, por supuesto, hay que pedir a todos los ciudadanos, sin excepción, que actúen de manera cívica, haciendo bueno también el refrán que el propio Ayuntamiento utilizó hace meses en una campaña de concienciación: no es más limpio el que más limpia, sino el que menos ensucia. Sólo así daremos pasos en la dirección correcta para mejorar nuestra calidad de vida.