El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Tras la inauguración el viernes a cargo del paleontólogo Juan Luis Arsuaga, padre de los yacimientos de Atapuerca, los Cursos de Verano de la Universidad Complutense de Madrid han contado esta semana con la presencia de distintas personalidades del mundo de la política, la cultura, la ciencia o la investigación, entre otros ámbitos, como el ministro José Ignacio Wert o el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, quien indicó que la sociedad española “tiene una deuda pendiente con las víctimas del terrorismo”.
Destacó también la intervención del Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, dentro del curso sobre los personajes femeninos en sus novelas. La crisis también apareció, si bien el escritor reivindicó algo de optimismo a los europeos, porque “no es justo hundirse en el pesimismo, sobre todo cuando uno se asoma a otras fronteras”. En clave de actualidad se refirió también a México, deseando que “el PRI que vuelva al poder no sea el PRI que lo dejó después de 70 años”.
Adentrándose en la cultura, el autor de Lituma en los Andes o El sueño del celta confesó su preocupación por que las tabletas sustituyan a los libros: “Ojalá que esa influencia del soporte no banalice los contenidos como sucedió con la televisión al hacerlos más asequibles a un mayor número de personas”. Esta reflexión le llevó a evocar su amor a las bibliotecas, hasta el punto de poder describir las ciudades desde aquellas.
Vargas Llosa dijo igualmente que un escritor no tiene la última palabra sobre lo que escribe, sino, que debe aprender de las interpretaciones que de su obra elaboran los lectores. El novelista peruano señaló también que la poesía había estado presente en su infancia, sobre todo la de Pablo Neruda y Amado Nervo.