Editorial

Investigaciones y certezas

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Casi tres meses después de que el caso Torrelodones empezara a acaparar titulares de prensa, el mejor resumen de la situación lo han hecho los propios ediles expedientados por el PP, Reyes Tintó y Jesús María Pacios: “Los concejales que suscriben consideran que no pueden retener toda la información que ha llegado a su conocimiento, y que carecen de medios para realizar las investigaciones precisas. Tampoco pueden pronunciarse sobre la absoluta certeza de las informaciones que han recibido, ni sobre su calificación como irregulares o no”. Este entrecomillado no está sacado de ninguna de las muchas declaraciones realizadas en los últimos días, sino del dossier que el pasado viernes presentaron ante la Fiscalía Anticorrupción. Es decir, que estamos únicamente en el terreno de las especulaciones, aunque para llegar hasta aquí hayamos atravesado un largo recorrido de graves acusaciones, sin que hasta el momento, tal y como ha indicado el secretario general de los populares madrileños, Francisco Granados, se haya aportado ninguna prueba. Desde este semanario hemos hablado en más de una ocasión de la existencia de una conspiración para apartar a Mario Mingo y Carlos Galbeño de sus puestos, y este informe, que en buena medida es un refrito de lo ya dicho hasta el momento, no hace sino confirmar todo esto. Hay cosas que se caen por su propio peso, como el hecho de que la concejala de Educación pudiera ser a la vez directora de un colegio concertado, y otras que tienen un cierto aire rocambolesco: algo así como uno que dice que otro dijo que le dijeron, y así hasta llegar al concuñado de Mingo, al Área Homogénea Norte o al parking de la calle Real. Parece que hay poco más que añadir en este asunto, aunque cabe pedir a todos los políticos, desde el alcalde a los grupos de la oposición, la máxima responsabilidad en la comisión especial informativa que se abrirá el lunes. Izquierda Unida ha reclamado ya que el informe de Tintó y Pacios se incorpore a los trabajos de este órgano. El PP apoyó en su momento la creación del mismo y haría bien ahora en no oponerse a que el dossier, con sus acusaciones y también con la falta de certezas sobre las mismas, pase a formar parte de la documentación aportada a la investigación.