Deportes

Crónica de un ascenso agónico

C.U.C. VILLALBA

JAIME FRESNO | Miércoles 22 de octubre de 2014

C.U.C. VILLALBA 2
C.D. DOSA 1

· CUC Villalba: Raúl Núñez; Bielza, Gerardo, Rubén Muñoz, Linares (Dorado, 69); Sergio Vázquez (A), Guille (A) (Oliván, 73); Manu (Juli, 64), Javi Martín, Álvaro; y Alberto Losa (Vizcay, 88)
· CD Dosa: Somonte; Campos, Oli, Alfre, León (A) (Héctor, 59); Raúl (A), Óscar (A) (Adri, 57,(A)), Isma (A) (Lezcano, 57), Agus (A,A,R,52), Nacho y Unai (A) (Barral, 77).
· Árbitro: Santiago Sacristán (1). Irregular.
· Incidencias: Tres cuartos de entrada largos en la Ciudad Deportiva, unas 800 personas, en mañana soleada con unos 28 grados de temperatura y césped irregular, agostado en varias zonas. Los jugadores del cadete del CUC Villalba recibieron los diplomas que les acreditan como campeones de Liga.
El alcalde de Collado Villalba, Agustín Juárez, y el principal portavoz de la oposición, Juan José Morales, presenciaron el partido desde el palco.

800 personas contenían el aliento en la Ciudad Deportiva. Muchas estaban al borde de la taquicardia, hasta que Jesús Miguel Oliván, un elegante interior con tablas en Segunda B, que acude a cada entrenamiento procedente de Aranjuez, puso un centro excelso con la derecha que trazó el arco perfecto hacia la cabeza de Alberto Losa. El centro delantero, que venía ganando la acción a su marcador, cabeceó a la red con toda la rabia que suele aflorar cuando el objetivo se pone tan duro. Era el minuto 86, el gol era el 2-1, y la Ciudad Deportiva estalló. El campo, sorprendentemente lleno sólo en tres cuartas partes, lo celebró como se merecen los goles que valen un ascenso y un campeonato.
Hasta ahí, el Villalba había sido exigido por un rival enorme, cuyo nivel elevó el valor de la gesta. El Dosa jamás fue el oponente que no se juega nada. Como le gusta decir a David Gordo, fue una victoria que el equipo tuvo que conseguir metro a metro. Y ocurrió que, de nuevo, el Villalba fue de menos a más. Fue un manojo de nervios al principio y, por momentos, pareció descarrilar. Sobre todo en una secuencia de cuatro minutos, iniciada por Agus. El buen delantero del Dosa recogió una asistencia de Unai y entró como cuchillo en mantequilla por el medio de la línea de cuatro para batir a Raúl con un tiro raso sobre la salida del portero: 0-1. Sin solución de continuidad, León rozó el 0-2, en un remate colocado a media altura desde el perfil izquierdo que escupió el palo, y David Gordo fue expulsado por protestar una falta no pitada de Unai sobre Javi Martín. Cuatro minutos de zozobra. Curiosamente, con el técnico camino de la escalera que lleva a la grada, el CUC Villalba despertó de la pesadilla. Lo hizo cuando se activaron Álvaro, acostado a la derecha, Manu, tejiendo por el medio, y Javi Martín, llegando por la izquierda. No podía ser de otra forma. A la primera, Somonte respondió con un paradón al 10 amarillo; a la segunda, Alberto Losa restableció el empate con una media vuelta de ariete puro. El gol desterró los nervios y el Dosa, cómodo hasta entonces, empezó a sufrir. Antes del descanso, el larguero rechazó un cabezazo de Javi Martín, y Rubén, libre de marca, no embocó el rebote.
La tensión era patente. El empate al descanso daba el ascenso, pero las victoria parcial del Santa Ana en Alcobendas dejaba la caída a la tercera posición a expensas de un gol del Torrejón en Coslada.
A vuelta de vestuarios, el Villalba salió decidido a sentenciar, pero los palos de la portería del Dosa repelieron un cabezazo de Losa y un disparo de 25 metros de Sergio Vázquez, todo en apenas cinco minutos. La respuesta visitante pudo ser letal, pero acabó siendo como un tiro en el pie: Nacho disparó al palo de Raúl y el rechace viajó al poste contrario, donde Agus remachó con la mano y se ganó la segunda amarilla. Con diez, el Dosa dio el esperado paso atrás, pero no perdió el orden. El gol del Coslada vino a dar algo de tranquilidad, a base de mantener a raya al Torrejón, pero en el ambiente había prendido la necesidad de la victoria. El Villalba la buscó con paciencia, una virtud en tales circunstancias, y siguió generando ocasiones, pero Somonte opositó a héroe con tres intervenciones inconmesurables, a remates de Álvaro, Sergio Vázquez y Javi Martín, éste a quemarropa. Fueron momentos en los que se temió lo peor, porque el destino parecía negar el gol de forma caprichosa. Pero el reloj alcanzó el minuto 86 y todos supieron que la angustia acababa cuando Oliván puso su excepcional banana y Alberto Losa subió a los altares con un cabezazo que ya es historia en el CUC Villalba.