Comunidad de Madrid

Esperanza Aguirre dice que la intervención del Estado en Bankia “garantizará” los ahorros

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, manifestó ayer que las medidas de intervención que ha tomado el Gobierno de la Nación sobre Bankia garantizarán los ahorros y los depósitos de los clientes, mientras que el líder de la oposición madrileña, Tomás Gómez, ha señalado que la entidad bancaria se ha convertido en “un juguete roto” del PP.

En los pasillos de la Asamblea y minutos después en el pleno, Aguirre señaló que el Ejecutivo central “va a tomar todas las medidas necesarias” para garantizar el futuro de la Caja y para que ésta sea “más solvente y seria”. Por ello, ha mandado un mensaje de “tranquilidad” a los madrileños, depositantes, ahorradores, impositores, clientes y trabajadores de Bankia, que con estas medidas “se les da respaldo y solvencia”.

En su turno de intervención, Tomás Gómez (PSM) ha acusado de “irresponsable” a la presidenta regional por su política sobre Caja Madrid. Así, ha señalado que los ex presidentes de la entidad, Miguel Blesa y Rodrigo Rato, así como la propia Aguirre y el ex alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, “han peleado por la caja como un juguete hasta que lo han roto”.

Además, el portavoz del grupo socialista en la Asamblea ha asegurado que el PSOE “va a estar vigilantes para que no caiga el dinero de todos ciudadanos que se ha utilizado para sanear un banco, cuando no hay dinero para sanidad y educación”.

Por su parte, el vicepresidente y portavoz del Gobierno regional, Ignacio González, cree que los responsables de la situación actual en Bankia son el ex presidente de Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, la entonces vicepresidenta económica Elena Salgado, y el gobernador del Banco de España, Miguel Fernández Ordóñez.

Por un lado, González ha indicado que en su día Zapatero y el entonces jefe de la oposición Mariano Rajoy no llegaron a ningún acuerdo para privatizar las cajas, que éstas no se han privatizado y que “eso a lo mejor puede ser uno de los grandes problemas que ha tenido el sector financiero español a lo largo de los últimos años”.

Privatización
En este sentido, ha señalado que “todo el mundo conoce” que desde hace “mucho tiempo” la posición que ha defendido la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha sido que las cajas “deberían tener un dueño y funcionar como el resto de las empresas” y “la vía debería haber sido la privatización”.

Por otro lado, ha criticado que “parece” que a a gente se le olvida que se está hablando del sector financiero, que la “máxima autoridad del sector financiero es el Banco de España” y que al frente del mismo se colocó por parte de Zapatero, “que decía que no podía haber políticos en las cajas, ni más ni menos que al secretario de Estado de Economía de su gobierno, que es la máxima autoridad monetaria”.

Así, señaló que éste “era el encargado de fiscalizar y controlar todos los años el funcionamiento y las cuentas de todas las entidades financieras de este país” y que no se ha oído al gobernador del Banco de España “nada de adoptar ninguna medida de saneamiento e intervención de ninguna medida hasta que se ha producido esta circunstancia”.
“Nadie habla de la responsabilidad en su caso, aunque sea vigilando, del gobernador porque todas las entidades están sometidas a la inspección del Banco de España todos los años y no le he oído hablar de la necesidad de intervenir en ninguna caja”, indicó.

De hecho, añadió que sólo recuerda que muchas de las fusiones y de las valoraciones en el sector de cajas que se han hecho ha sido “con el beneplácito expreso del gobernador de Banco de España y del Ministerio de Economía y Hacienda, en su momento Vicepresidencia del Gobierno”.
“La responsabilidad es del legislador, el Gobierno de Zapatero; el ministro de Economía, Elena Salgado, y del gobernador del Banco de España, Fernández Ordóñez... con nombre y apellidos para que sepan de qué estamos hablando, porque parece que se nos olvida”, reiteró.

Por último, manifestó que dentro de lo malo, lo ocurrido puede ser una “buena noticia” en el sentido de que “sirva para sanear el sector financiero y darle estabilidad y confianza”. Esto, ha apostillado, es “lo que se busca desde hace tiempo con las reformas que esta poniendo en marcha el Gobierno”.