“La feria de Santiago Apóstol se ha abaratado un 70 por ciento”

Una de las gratas noticias que nos deja 2011 fue la positiva feria de Santiago Apóstol de Collado Villalba. Un cambio de aires necesario, una fórmula más ventajosa, un estilo distinto basado en la transparencia. La victoria del PP en las urnas marcó el final del monopolio empresarial. Meses después, el concejal de Festejos, Alberto Sánchez, hace balance.


A pesar de la premura del tiempo, consiguió sacar adelante una buena feria taurina de Santiago Apóstol. ¿Cuáles fueron las claves?
Fue todo muy rápido, pero echando la vista atrás estoy muy contento de cómo salió, aunque es cierto que ahora, a toro pasado, y nunca mejor dicho, hay cosas que las hubiera hecho de otra manera.

Al final, fueron cinco festejos, con una corrida de toros y una novillada con picadores, lo que, teniendo en cuenta el estado de las arcas municipales, parece todo un logro.

La primera idea fue suspender la feria. No había fórmula posible, pero hubo buena predisposición por parte de todos; no me olvido de la cesión de los seis toros del ganadero Hilario Serrano, y eso nos dio aire para echar el resto. El poco tiempo que tuvimos nos hizo tomar decisiones que se hubieran podido hacer mejor, pero en general hubo ganaderías de prestigio y estuvieron toreros como Iván Fandiño, que a la postre ha sido la relevación del año.

El vasco fue el triunfador del ciclo villalbino ante los toros del ganadero local, cuajando una gran faena al buen sexto toro.

Puso todo de su parte y, lesionado como estaba, hizo un gran esfuerzo por torear en Collado Villalba. Quiero darle las gracias por su entrega y predisposición.

Uno de los logros más importantes fue la gestión directa. Por primera vez el Ayuntamiento se hizo empresa y consiguió ahorrar dinero. ¿Cómo resultó la experiencia?
Fue enriquecedora. Creíamos que era más complicado y difícil, no entendemos por qué antes había habido tantos intermediarios. Lo fácil y cómodo es darle la feria a un señor y no trabajar, pero aquí nos han puesto los vecinos para hacerlo y para resolver estas cuestiones. Vamos a seguir con esta fórmula y esperemos que año tras año, con la experiencia que vamos a ir adquiriendo, salga más y mejor. Fue muy positivo.

Hay un dato importante que se debe dar a conocer a los aficionados: los ingresos íntegros del ciclo reportaron en el Ayuntamiento y no en la empresa.

Esto era algo a lo que no estaban acostumbrados en este Ayuntamiento. La premura llevó a cometer algún fallo, que se resolverá en el futuro. Sí es cierto que la feria se ha abaratado más de un 70 por ciento respecto a lo que podría suponer hacerlo con un tercero. De hecho, ahí está el pliego de condiciones que iba a sacar el anterior Equipo de Gobierno, y que para este capítulo estaba en 300.000 euros. Sin embargo, la feria de Santiago Apóstol 2011 ha salido por poco más de 80.000 euros. Los festejos eran similares y han sido cinco en total.

Una buena gestión después de años de despropósitos...

Estamos muy contentos, pero estoy convencido de que todavía se puede hacer mejor. No digo que hacerse mejor sea más barato, también se puedan dar festejos de mayor calidad pero se puede mejorar con alguna novillada picada más y se pueden estudiar otras cosas.

Un aspecto relevante fue la buena política de precios porque antes el empresario se llevaba subvención, ingresos y además ponía precios prohibitivos.

Al ser una gestión municipal pusimos unos precios que creíamos que nuestros vecinos podían pagar. El año pasado el abono estuvo en torno a los 50 euros, y este a la mitad. Creo que es la línea que debemos seguir, con la posibilidad de que haya abonos para vecinos que sean empadronados y otro distinto para los de fuera. Se estudiaran fórmulas.
¿Animaría a los concejales de otros municipios que quizá no se atreven a dar este paso?
Sí. Como decía, es una experiencia enriquecedora. Con el tiempo lo piensas y estoy deseando volver a gestionar la feria; lo que ocurre es que los presupuestos son los que son y la situación es complicada.

“Villalba no puede dejar de tener su feria”
Alberto Sánchez tiene un gran dilema para el próximo año que tendrá que afrontar, máxime teniendo en cuenta la penosa situación económica heredada. “Collado Villalba ha tenido tres ferias y ese es el quid de la cuestión. Este año, entre la de El Gorronal y la de San Antonio se habían gastado el triple de lo que nosotros hemos destinado a la de Santiago. Esto da una idea de cómo han despilfarrado el dinero en este Ayuntamiento. Ahora tenemos que pensar si sacrificamos alguna feria o hacemos una medianamente curiosa, porque dinero en 2012 tampoco va a haber y será un año muy complicado. Hay que reunirse con todo el tejido asociativo y tomar decisiones drásticas porque quizá haya que reducir una o dos ferias”.

Para encaminar todo posiblemente llegue algún tijeretazo. “Este año, la feria de El Gorronal, únicamente con un festival, costo 36.000 euros y la de San Antonio supuso otros 130.000. Desde luego que ahora se podría hacer mucho más económico, pero el presupuesto va a ser aún más reducido al de este ejercicio. Hay que verlo con la Peña San José Obrero y los Mayordomos”.

Una esperanza sí nos deja el concejal de Fiestas para 2012: “Un municipio como Villalba no puede dejar de tener su feria. La capacidad de mi Ejecutivo es grande y vamos a ponernos en faena. Sí me gustaría que repitiera Hilario Serrano después del esfuerzo que hizo este año, aunque espero tener algo de dinero para pagarle. Hemos hablado con las escuelas de Madrid y Moralzarzal, y si tenemos que hacer novilladas para la forja de nuevos valores, también es positivo. Debemos exigirnos y optimizar los recursos. Serán fiestas con más participación”.